No ha aguantado más su situación. Después de décadas sufriendo las dolencias de una esclerosis múltiple que la condenó de por vida a permanecer inmóvil en la cama, María José Carrasco, decidió hace unas horas acabar con una vida insoportable, llena de dolor y sufrimiento.
María José ha tenido la suerte de vivir con un compañero que le ha demostrado durante todos estos años su amor. En todo momento, durante todo el día, año tras año. Todos los días, a un escaso metro de su cama, Ángel le leía a María José sus obras y autores preferidos. Eran los momentos en los que María José lograba olvidarse de su cuerpo y se desplazaba con su alma de la mano de su auténtico Ángel de la guarda; un poco más arriba de la tierra, y un poco más abajo del cielo.
Ha sido una decisión firme y deliberada, de la cual la pareja empezó a hablar hace veinte años. Las imágenes que Ángel ha grabado con el consentimiento de María José, así lo demuestran. En ellas se puede constatar la naturalidad con la cual el fiel y buen compañero, accediendo al auxilio de su amada, arropa con su mano las suyas, y la dirige sus últimas palabras de cariño, mientras María José le mira y dirige una mirada enternecedora de profundo agradecimiento.
No debe ser fácil tomar una decisión de semejante envergadura. Antes han debido de tener lugar muchas conversaciones, y muchas despedidas. Ni debe ser un plato de buen gusto encontrarse en el calabozo minutos después de haber hecho un acto tan generoso de amor. Nadie se explica por qué en casos tan excepcionales como el de María José, la ley puede llegar a estar tan lejos de los derechos humanos; la lógica irracional de un código penal de los deseos íntimos de los ciudadanos que los sufren situaciones extremas de este tipo, y que la sensibilidad de algunos líderes y algunas fuerzas diste tanto de las necesidades vitales de las personas, que al no ser atendidas por los servicios públicos, terminan por hacerse cargo de su lamentable situación.
Hace unos meses, en octubre del 2108, el señor Casado hizo unas declaraciones públicas. En ellas negaba que existiera un debate público sobre la eutanasia. Y bloqueó al igual que Ciudadanos, la despenalización de la eutanasia, ante una propuesta presentada por el Psoe y Podemos. Había entonces temas más importantes para la derecha que la vida y la muerte digna de los españoles, como eran la convocatoria urgente de unas elecciones, y el consabido y socorrido monotema catalán.
La derecha miope representada por el PP de Casado, así como la formación naranja de Rivera, ha acusado al Psoe de querer romper España, mientras la España real que se rompía, se moría, aún sigue agonizando, y ante la cual no presentaron ninguna iniciativa durante la oposición, era y sigue siendo la despoblación constante e imparable de la España rural. No solo la catalana, sino la de una gran parte del Estado de la nación.
Hace unos días la Comisión Permanente representada por las distintas fuerzas del arco parlamentario, ha votado en una sesión los decretos sociales del Gobierno de Sánchez. El Partido Popular ha votado en contra de todas las medidas, compuestas por seis decretos, ya que los considera más electoralistas que necesarios para los españoles que se encuentran en una situación más vulnerable. Ciudadanos por su parte se ha abstenido de aprobar algunos, y se ha abstenido de los demás. Unas medidas que ha apoyado hasta Bildu.
Se da la circunstancia de que la situación se va a invertir dentro de unos días, cuando se inicie oficialmente la campaña electoral. Entonces los mismos líderes que se han abstenido y han rechazado las propuestas sociales destinadas a los españoles más vulnerables, solicitarán su confianza a estos españoles, no puntualmente, sino para un periodo de cuatro años. Y estarán encantados de que éstos voten, no se abstengan ni rechacen ningún voto a su formación.
Si se tiene en cuenta que nos encontramos en plena campaña electoral, y que dichas fuerzas ya están escatimando derechos a los ciudadanos, se puede hacer uno a la idea a que clase social van a dirigir sus propuestas electorales si tienen ocasión de llegar al poder. Y no solo eso. Falta saber cuál de los tres programas de las tres derechas va a tener más peso sobre los demás.
Veremos pues; nosotros, no ellos. Ya saben, la miopía...
José Luis Meléndez. Madrid, 5 de abril del 2019
Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario