tag:blogger.com,1999:blog-49021957125143754312024-03-23T23:10:48.827+01:00Pluma en RistreJosé Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.comBlogger652125tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-89589663581409827242024-03-22T00:02:00.014+01:002024-03-23T23:09:52.743+01:00La primavera<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGLhRW59uQTS9A_Fe_ed2UKoXr8KgUdghq-Hq1l2zxJSd0rW5_TUbrMK0QbtOBZsPIpM70Xyost2b_McBXR9iNnUBpSv8nwpoLyuvSkyXFXLIPbBhlMQkbCpIbDSqbScbhZ4iQAtr0_eEIvofM4fjZAUupzYDr7qbB43xVS0cSsemB3wZ0NF1Dgo8dk7k/s1600/La%20primavera.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="427" data-original-width="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGLhRW59uQTS9A_Fe_ed2UKoXr8KgUdghq-Hq1l2zxJSd0rW5_TUbrMK0QbtOBZsPIpM70Xyost2b_McBXR9iNnUBpSv8nwpoLyuvSkyXFXLIPbBhlMQkbCpIbDSqbScbhZ4iQAtr0_eEIvofM4fjZAUupzYDr7qbB43xVS0cSsemB3wZ0NF1Dgo8dk7k/s1600/La%20primavera.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>La primavera siempre ha estado sobrevalorada</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
He estado muchas veces tentado de compartir esta versión interpretada por KT Tunstall - "2000 Miles" - de The Pretenders en esta red social. Como saben no es la que más me gusta, pero he de reconocer que está muy lograda. Sé que es un tema invernal y que hace unas horas festejaba la llegada de la primavera con otro vídeo. No es nada raro. A la primavera como a cualquier otra estación, se entra poco a poco.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Este año no sé porqué me cuesta más que otros años dejar el invierno. La primavera empieza a gustarme menos que otras estaciones como por ejemplo el otoño. ¿Motivo? Es una estación en la cual la naturaleza nos condiciona más a todos los niveles y eso para cualquier hombre o mujer amante de la libertad debería ir en contra de sus principios. Digo debería, porque ante tanto exceso de estímulos no es fácil, aunque si posible, pasar desapercibido.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La primavera ha llegado como todos los años con la treta de su hipotética alegría y de su exagerada belleza. ¿Es acaso bello ver las distintas especies sometidas en rigurosa exclusividad a sus funciones reproductoras? ¿Causa alegría ver a las madres estresadas por sus crías? ¿Y a los padres jugandose la vida para conseguir algo de comida para sus crías? ¿Es hermoso ver como se caen y mueren las crías de sus nidos por golpes de calor, o cómo unas especies se comen las crías de otras? Que sea una estación más colorida, cálida y gratificante para la especie humana no quiere decir que lo sea en líneas generales para el resto de las especies de la naturaleza. Seamos al menos un poco objetivos y no desvirtuemos la realidad a nuestros propios ojos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La primavera es una estación sobrevalorada. Que se lo pregunten sino a las personas que padecen algún tipo de alergia. Cada año las primaveras son menos primaveras y más veranos, por efecto del cambio climático. El lema de la estación podría resumirse en que hay que aparearse porque es una <a href="https://www.youtube.com/watch?v=Kt1RCqq74HY">ley natural</a>. También es una ley natural matar y no la cumplimos. ¿Es ética la ley natural?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Les dejo la primavera a todos los enamorados que cuando llegue el invierno tendrán la ocasión, aunque no sé si la paciencia, de mirarse con otra luz. Seguiremos, no obstante, echando la culpa a las vacaciones por obligarnos a convivir juntos más tiempo del que estamos acostumbrados. O a la mismísima pareja, en vez echársela a la naturaleza, que en su día, logro alterar las glándulas de sus respectivas víctimas, hasta conseguir hormonar su sistema circulatorio por completo. A todos menos a sí mismos, es decir, a aquellos que optaron por abandonarse a los rituales de apareamiento, tan propios de estas fechas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si las bicicletas, como dicen, son para el verano, las primaveras siempre han sido más propias de El Corte Inglés. No porque haya sabido adelantarse a ellas, sino porque ha sabido sacar el máximo provecho de las mismas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 21 de marzo del 2024. Fuente de la imagen: pixabay.com</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-40868520076497879822024-03-14T11:24:00.007+01:002024-03-15T10:21:03.688+01:00El momento<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgMrzd_u2sVFOqOKrVI_SoUFNv6LZaidOZB5FKCjlW3y7Q9gSkb_HEue8qr7Om4BgyUp5xa81kbYCPVZmjveELJEfLz9fS4irwUEG1481rTtBo8IT0PFLWiJIu5D4M70jws4doFkRXZQyobuey8wbROTCjLDp3KLeL0z7RAxzd0LkATH85gUXiEZ8_k0Ds/s1600/bandera%20blanca.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="408" data-original-width="612" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgMrzd_u2sVFOqOKrVI_SoUFNv6LZaidOZB5FKCjlW3y7Q9gSkb_HEue8qr7Om4BgyUp5xa81kbYCPVZmjveELJEfLz9fS4irwUEG1481rTtBo8IT0PFLWiJIu5D4M70jws4doFkRXZQyobuey8wbROTCjLDp3KLeL0z7RAxzd0LkATH85gUXiEZ8_k0Ds/s1600/bandera%20blanca.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Durante estos más de dos años han sonado más las armas que las palabras</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Llevamos cumplidos más de dos años de guerra en Ucrania, desde que las tropas rusas invadieron este país, el 24 de febrero del 2022. El resultado de dicho conflicto arroja en la actualidad 30.000 víctimas civiles y 6.000.000 de refugiados. La contienda permanece estancada hace meses ante la falta de suministro de armas por parte de EE.UU. Los republicanos de Trump han decidido bloquear el envío de dichas armas a Ucrania.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Pero es realmente a Ucrania o a Europa, a la que Trump pone en evidencia, con este bloqueo? El proyecto europeo no es algo que forme parte de su política, como bien ha demostrado con la imposición de aranceles y con su política en materia de defensa ("América first"). ¿Está esperando Putin a que llegue Trump a ser presidente para darle una nueva dinámica al conflicto, mientras Trump se ocupa de sus asuntos domésticos?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El primer ministro húngaro Viktor Orbán, que ha mantenido este viernes una entrevista con Donald Trump, ha manifestado que el expresidente americano tiene un plan para acabar con la guerra. En una entrevista emitida el domingo en la televisión pública húngara, Orbán ha manifestado: «Trump tiene una idea clara con la que es muy difícil discrepar. Dice lo siguiente: lo primero no pondrá ni un penique en la guerra de Rusia y Ucrania y así la guerra terminará porque Ucrania evidentemente no puede mantenerse por sí misma”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La preocupación y el nerviosismo ya se palpan en Europa ante este hipotético escenario a finales del 2024. Prueba de ello son las declaraciones unilaterales de Macron de considerar el envío de tropas a Ucrania, el restablecimiento del servicio militar en Suecia y que Alemania se esté planteando reinstaurarlo. Mucho más, después de escuchar las recientes declaraciones en las que el expresidente norteamericano dijo que Moscú podría "hacer lo que le diera la gana" con los miembros de la OTAN que no cumplan los objetivos de gasto.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Durante estos dos años han sonado más las armas que las palabras entre Ucrania y Rusia. ¿Es ésta una buena estrategia no para ganar, sino para terminar la guerra? ¿Está utilizando Zelenski todos los medios a su alcance para conseguir uno de estos dos objetivos? ¿Se ha planteado Zelenski conservar la neutralidad renunciando a entrar en la Unión Europea, a cambio de que Moscú retire sus tropas de las zonas recientemente ocupadas?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Quiénes son los responsables no ya de haber llegado a un acuerdo, sino de al menos haberse sentado a hablar, para ir acercando posturas encaminadas a una paulatina distensión, los representantes públicos o los ciudadanos que no exigen en las calles a los mismos un plan de acción encaminado a desencallar y parar esta barbarie?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me vienen a la memoria las imágenes de los ciudadanos rusos que en una situación de represión total salen a las calles a protestar, jugándose su libertad, cuando no su vida para defender la libertad y la paz, y como por el contrario los europeos nos hemos acostumbrado a ver la guerras televisadas como si fueran películas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Preferimos quejarnos, eso si, de lo cara que está la compra como consecuencia de la guerra, en lugar de la muerte o el precio de miles de vidas. Y nos preocupa más la corrupción que la integridad personal y territorial de nuestro continente. “Tendremos que arrepentirnos en esta generación, no tanto de las malas acciones de la gente perversa, sino del pasmoso silencio de la gente buena”, decía Martin Luther King (1929-1968), líder antirracista estadounidense.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Las palabras del Papa Francisco dirigidas a Zelenski además de sabias, valientes y oportunas, añaden por primera vez algo de racionalidad a un escenario emocional de continuas escaladas verbales. No es la primera vez que Zelenski recibe este globo sonda. El 5 de noviembre del 2022, <a href="https://www.abc.es/internacional/biden-insta-zelenski-aceptar-negociacion-directa-putin-20221106201043-nt.html">Biden</a> instó al primer ministro ucranio a aceptar una negociación con Putin.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Decía Albert Einstein, que “La locura es hacer siempre lo mismo y esperar resultados diferentes”. ¿Quién está más loco Putin o Zelenski? Dejar de financiar la guerra como propone Trump supondría un saldo negativo para Ucrania y significaría un apoyo indirecto a Putin.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿No sería mejor una victoria para ambas partes y para el mundo, volver al kilómetro cero, antes de que Trump llegue a la presidencia y alcanzar un acuerdo de retirada por ambas partes, que evitara sorpresas en el corto y en el medio plazo, y cerrara de una forma satisfactoria el conflicto?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 13 de marzo del 2024. Fuente de la imagen: istockphoto.com</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-12687790490762864382024-02-28T19:36:00.029+01:002024-03-08T18:15:33.685+01:00¡Feliz cumpledaños!<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhoJagJZfLalTf_BWlXJKPGkfPmbyxatNLGOC1OTV03lDo1gZ7mZGDyrOOuSMaGMQfj0ydhOvQ6eADDoEa9_-6zlPiv8hcxqUsZcjZu8uuGbmEY4lUh-8V5Lujnv71EAW2j3XiA8zEfqs1LjGz4Xp_f0T3IXdNDZpWRPFMtoWntOz3Rhkd60d7VAjbThqg/s1600/Feliz%20cumpleda%C3%B1os.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="1280" data-original-width="853" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhoJagJZfLalTf_BWlXJKPGkfPmbyxatNLGOC1OTV03lDo1gZ7mZGDyrOOuSMaGMQfj0ydhOvQ6eADDoEa9_-6zlPiv8hcxqUsZcjZu8uuGbmEY4lUh-8V5Lujnv71EAW2j3XiA8zEfqs1LjGz4Xp_f0T3IXdNDZpWRPFMtoWntOz3Rhkd60d7VAjbThqg/s1600/Feliz%20cumpleda%C3%B1os.jpg"/></a></div>
<b>Aún sigo llorando este día como una festividad que los demás se han montado a costa de mi llegada al mundo</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La bibliotecaria después de formularle la pregunta y de exponerle mi situación personal asiente con la cabeza y una media sonrisa: puedo permanecer en la sala, a pesar de mi condición de refugiado. Dentro de escasas horas voy a nacer, pero seguro que más de uno ha decidido no esperar y felicitarme en el día de mi cumpleaños por adelantado.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ni siquiera me han dado tiempo a que se abriesen mis ojos y a que mis delicados oídos escuchasen las mismas patochadas del año anterior: "¡feliz cumpleaños!". Como si el hecho de cumplir años fuera un acto en el cual uno se ha de sentir exclusivamente feliz, y, que para más inri hay que celebrar por imperativo social. Pero lo más grave es que han sido felicitaciones que se han realizado sin que un servidor llegara a la vida, sin que estuviera presente.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El hecho reviste más gravedad cuando uno repasa los sesenta cumpleaños pasados. Todas las felicitaciones que he recibido a lo largo de mi vida han sido realizadas antes de mi hora oficial de nacimiento al vientre de mi madre, más que al niño que lleva dentro. Con este gesto lo único que han conseguido es sumarle a mi madre sesenta años más de la cuenta, lo cual es un agravio mucho mayor hacia ella que hacia el supuesto protagonista de este día.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los cumpleaños son fechas en las cuales uno recibe varios tipos de felicitaciones. Las hay sinceras, de compromiso, cotillas para ver qué haces y que es de tu vida. Las hay vengativas y crueles que a través una pregunta, te hacen recordar los años que tienes. Las hay de bienqueda en las cuales uno queda mejor con su conciencia que con el recién nacido, y, existen felicitaciones hipócritas, en las cuales el enemigo se disfraza de amigo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Comprenderán ahora, que en un día como este, por culpa de algunos, me sienta poco menos que perseguido ante las llamadas inoportunas e indiscriminadas y que no entienda como encima se me acose y acuse de no cogerlas, cuando todavía no he nacido. Eso además de ignorancia es un ejercicio de mala fe.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y teniendo en cuenta que mi hora oficial de nacimiento son las 22:00 horas, supongo que una gran mayoría de personas comprenderán porqué mi teléfono con su respectiva asistente personal, dotada de inteligencia artificial, permanece apagado en espera de que yo nazca. Por tanto las felicitaciones oficiales y reales deberían realizarse entre las 22:00 y las 00:00 horas, algo que nadie cumple en mi cumple (valga la redundancia).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Felicitar a través de una llamada o de un mensaje, con dos palabras prefabricadas para la ocasión la llegada al mundo de un supuesto ser querido, en lugar de hacerlo personalmente, no deja de ser un simple cumplido. Así que como dicen que es de bien nacidos ser agradecidos, procedo en este mismo momento como cumpleañero a devolver los cumplidos recibidos con el mismo ánimo con el que estos años me fueron en su día proferidos. ¡Feliz cumpledaños!, pues, por todos los daños recibidos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Por qué la imposición forma parte de la supuesta felicidad que se le atribuye a este día?. ¿Por qué no se le pregunta a la gente antes de felicitarle el día, si lo celebra? ¿Por qué no nos felicitamos por otras cosas más importantes, de una forma espontánea, durante el resto del año? Si al menos fueran originales y sorpresivas las felicitaciones, pero es que ni eso...Todos los años las dos palabritas típicas (ocúpate de ser feliz tú en el tuyo, que a mí con mi normalidad me basta, ¡guapo!). O ¿Por qué no te ocupas de ser feliz tú en el tuyo y yo me ocupo de lo mismo cuando a mí, y no a todos, os parezca...?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Es absurdo desear felicidad. No porque muchos le deseen a uno felicidad va a serlo más. La felicidad se conquista, y, como todo, empieza por uno mismo. Una felicidad que se desea para un simple día, no es una felicitación sincera. Al recordar la fecha de nacimiento la primera conclusión que uno saca es que es no un año mayor, sino más viejo. Y me adelanto ante la pregunta de algún curioso/a: tampoco me consuelan las felicitaciones que vienen de personas más mayores.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Es acaso feliz el recién nacido ante su llegada al mundo? La primera manifestación de un recién nacido al mundo y a sus padres es un llanto. LLanto que bien podría traducirse como: "¿por qué me habéis traído a este mundo sin mi consentimiento?". No es de extrañar por tanto, que ante semejante pregunta los padres le devuelvan la respuesta al bebé con una sonrisa feliz e impotente, ante la felicidad exclusiva que supone para ellos. Me alegra comprobar, la coherencia que he mantenido en este día, a pesar de los años. Aún a mis 61 años sigo llorando este día como una festividad que los demás se han montado a costa de mi llegada al mundo. Y eso si que tiene motivos para cabrearse, más que para ser feliz.
Lo más divertido
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lo más divertido de los cumpleaños, sin duda alguna, es escuchar al día siguiente, los mensajes, sus contenidos, los tonos de voz, imaginándose las respectivas caras carnavalescas, para ver como se retrata cada uno en una fiesta a la que nunca fueron invitados. Lo más triste es que no me ofrezcan el mejor regalo que pueden regalarme en este día, que es la empatía necesaria para celebrar el día como más me apetece, sin necesidad de comparecer necesariamente ante una tarta delante de una mesa, ni de dar ningún tipo de explicaciones que no salgan voluntariamente de mi.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Eso sí, los ganadores de dicho concurso, como pueden imaginarse, todos los años, reciben la cumplida respuesta y agradecimiento a las felicitaciones más sinceras. Y curiosamente siempre son los mismos...
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 28 de febrero del 2024. Fuente de la imagen: pixabay.com</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-88199110348458068772024-02-23T20:05:00.003+01:002024-02-24T21:26:47.074+01:00La prótesis<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiq4wC34M6WgZZOG-5NoMnHMe4wWF5bAr9F32e9oYnT63q2OQ8bmORxYuvyXKTz8VV2bOjMfZVXlcQT875j0xDlB-Zx7760T9i9oLSjYopruNz0ap8FFi-O5V_lkxxW59kfb_zm4A0822DjTTjw4PFi0SgIMbbFcQu5WavR1dgNlHPD8bD4NkhJ8jJDmnI/s1600/Protesis.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiq4wC34M6WgZZOG-5NoMnHMe4wWF5bAr9F32e9oYnT63q2OQ8bmORxYuvyXKTz8VV2bOjMfZVXlcQT875j0xDlB-Zx7760T9i9oLSjYopruNz0ap8FFi-O5V_lkxxW59kfb_zm4A0822DjTTjw4PFi0SgIMbbFcQu5WavR1dgNlHPD8bD4NkhJ8jJDmnI/s1600/Protesis.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>En estos tiempos, es raro conocer a alguna persona que no requiera de una prótesis tecnológica</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lamentablemente la vida ya no es tan humana como lo era antes. En estos tiempos que corren, es raro conocer a alguna persona que no requiera de una prótesis tecnológica para relacionarse con los demás, y, de paso sobrevivir a la burocracia imperante.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La tecnología, “según sus avances” (sic), está transformándonos en seres cada vez más discapacitados. Por ejemplo, ya no somos capaces, como hacíamos antes, de dirigir la palabra ni de dar los buenos días a alguien que se encuentra en una parada o estación del transporte público. A nivel fisiológico la tecnología ha agachado nuestras cabezas, como evidente muestra de adoración y de beatitud que se le profesa de una forma tan continuada, como obscena. El mundo, la vida, ya no es lo que te rodea, es lo que existe dentro de un plasma móvil.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si bien es cierto que la tecnología ha demostrado su eficacia en determinadas circunstancias, como lo son los rescates de emergencias o la pandemia, se hace cada día más conveniente hacer una reflexión acerca de si hacemos un uso abusivo e indiscriminado de ella, así como los efectos que tiene y tendrá en nuestro cuerpo (sobrepeso, cervicales, traumatismos, pérdida de visión) y en nuestro cerebro a largo plazo, como son la pérdida de psicomotricidad o de funciones cognitivas, por poner algunos ejemplos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tampoco utilizamos las piernas ni hacemos el mismo ejercicio que antes. Hace años era la mano la que nos servía para escribir ayudada de algún útil. Entonces uno podía constatar la evolución de su grafía. La tecnología gracias a sus avances, ha conseguido anestesiar nueve de los diez dedos de los que disponemos, pero no por ello, tenemos que dejar de seguir agradeciéndole el grado de inutilidad al cual nos está lleva llevando (hablo de tecnología, no confundir con ciencia).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Más sencillo, cómodo y ético que quedar con alguien es despacharle a golpe de click o de pantallazo, evitando así desarrollar nuestras capacidades sociales y sensoriales. Tampoco es suficiente que nuestros ojos vean la escena de una película. Ahora la inteligencia artificial nos traduce la escena de forma verbal, como si fuésemos tontos y no supiésemos interpretar con nuestros sentidos, las distintas escenas que se desarrollan en el film. Y ahí entra el hecho de emplear el eufemismo de inteligencia artificial con objeto de someter a sus adeptos a la categoría de tontos naturales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ya lo ven, la IA ha adquirido una competencia más: la de ser la verdadera garante de nuestros sentidos. Así que ya lo saben: a partir de ahora no se fíen de lo que perciban sus sentidos en sus sesiones cinematográficas y acudan a la ayuda de la IA, antes de sacar sus propias conclusiones. “Un hombre se dispone a poner un punto y aparte” (sic).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Evidentemente la IA ha contribuido a que hayamos perdido emotividad, así como calidad y cantidad en nuestras relaciones humanas. A cambio de robarnos la intimidad y expresividad, la tecnología ha puesto a nuestra disposición emoticonos que lloran y se ríen por nosotros. Nos han desprovisto de herramientas personales pero como contrapartida han puesto a nuestra disposición aplicaciones para que sigamos evitándonos. Divide y vencerás.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ya no es necesario llegar al trabajo para fichar. Uno ya suele hacerlo de forma inconsciente, nada más encender su oficina móvil desde su casa una o dos horas antes de llegar a su empresa. El usuario enciende su oficina y ésta apaga y desconecta la mente del usuario de su vida real. Los vecinos, están, si, pero no existen (click). Desde ese momento el usuario no solo trabaja gratis, sino que ofrece su tiempo, sus energías y su privacidad a empresas que a su vez le ofrecerán sus servicios. Sus datos y su seguridad empiezan a partir de ese momento a estar expuestos a posibles amenazas. Nada sale gratis.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Mientras la tecnología va hacia adelante, nosotros como especie (hasta hace años dotada de unos mínimos de educación y humanidad), lo hacemos hacia atrás. La velocidad de retroceso, por no decir de retraso, es inversamente proporcional a los avances que nos ofrece la tecnología.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ahora gracias a la aparición del ChatGPT tampoco van a ser necesarias desarrollar facultades psicoanalíticas o de redacción. Ello nos impedirá descubrir y desarrollar nuevas facultades que hubieran podido convertirse para algunas personas en uno de los mayores placeres de sus vidas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tampoco se estila llevar un bolígrafo, como antes se hacía, para anotar asuntos personales, facilitar a alguien datos o hacer cuentas. Eso es cosa de carcas antiguos. Los modernos prefieren utilizar los datos de su smartphone, antes que las neuronas de sus respectivos cerebros. Ahora no son los mayores, sino los jóvenes los que necesitan hacer un mayor uso de éstas prótesis, lo cual define a grosso modo, el grado de degradación al cual hemos llegado.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los selfies y los emoticonos, como hemos visto, restringen y anulan nuestra capacidad expresiva. Si a eso añadimos que no nos miramos a la cara con mucha menos frecuencia que antes, se puede uno hacer a la idea del grado de deshumanización y despersonalización a las cuales nos ha conducido el progreso de la tecnología.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ese desprecio presencial al que suelen inducir las redes sociales nos ha arrebatado los tonos personales de nuestra voz, nuestros paseos, nuestra forma de andar y de reírnos. Nuestro perfume y nuestro olor personal, nuestra física y nuestra química. Nuestros abrazos, nuestros besos, nuestras caricias y la magia y luminosidad de una sonrisa cómplice.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La IA supone una amenaza hacia nuestras relaciones sociales y hacia nuestra intimidad personal. Su proselitismo es: o te adaptas a mis exigencias efímeras y cambiantes o te excluyo. Lo malo e inevitable es que para sobrevivir a la realidad que nos ha tocado vivir, hay que utilizar la tecnología, aunque sea a costa de tu "muerte personal".
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La tecnología se ha convertido en la nueva religión del presente y me temo que del futuro. Con una diferencia, los adeptos tecnológicos, han de tener más fe en sí mismos que en Dios, para volver un día a reunirse consigo mismos y conocer el paraíso que un día dejaron.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El único día que podremos constatar si la tecnología ha contribuido verdaderamente a nuestro progreso, será el día del apagón. Ese día podremos saber con certeza cuántas cosas hemos desaprendido, cuántas podremos y cuántas sabremos hacer.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 22 de febrero del 2024. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-58203312387625097492024-02-10T23:16:00.030+01:002024-02-14T15:15:26.276+01:00El otro cementerio<div style="text-align: justify;">
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhBRi4D7Ou5Zjjk07FDPISIsXZZjC7j5Dcs5OTNddFCeceKYC4A-GWn8l5_H5adG5FtlFuFfuWYfvtwdoOosv5Y0zUqTziljeOzbPL_HW4zsj7G6Ct8YfcygzSm_50qlT5JnyZDQwMDeJNc27qay2TUkpk0BUuZgx4ZrvfwikST30cEhcxdJoLUsxT8-z0/s1600/El%20otro%20cementerio.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhBRi4D7Ou5Zjjk07FDPISIsXZZjC7j5Dcs5OTNddFCeceKYC4A-GWn8l5_H5adG5FtlFuFfuWYfvtwdoOosv5Y0zUqTziljeOzbPL_HW4zsj7G6Ct8YfcygzSm_50qlT5JnyZDQwMDeJNc27qay2TUkpk0BUuZgx4ZrvfwikST30cEhcxdJoLUsxT8-z0/s1600/El%20otro%20cementerio.jpg"/></a></div>
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>El ser humano solo entierra a sus muertos, no a sus víctimas</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me he vuelto a equivocar. De nuevo me he convertido en la víctima de mi propia idealización. Hoy no es solo un día de muertos. Es también un día de entierro. Un día que no por menos duro que una muerte natural, se convierte en un día fácil. Porque dar muerte y entierro a un ser vivo, en su forma figurada, no es algo que, afortunadamente, ocurra de una forma frecuente.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Por este motivo, y con esta excusa, voy a permitirme la licencia de ahorrarme un falso duelo. Eso supondría volverme a engañar o permanecer en el autoengaño en el que he vivido durante décadas. Creyendo que significaba para el finado/a algo más de lo que yo pensaba o creía.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El verbo creer me ha jugado de nuevo una mala pasada. De nada sirve, como dicen, que la fe mueva montañas, cuando la verdad, por medio de la realidad, se apodera de ella. Entonces el montículo se convierte en lo que antes era: un desierto.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El entierro simbólico e imaginario ha tenido lugar hace escasas horas, en las inmediaciones de mi domicilio. En un hoyo del descampado ya descansa la imagen del difunto/a. En el reverso de dicha instantánea, han quedado escritas las emociones, impresiones y recuerdos fingidos que han dejado de formar parte de esta relación, desde ese mismo momento. Después de cubrir el agujero con una cara de circunstancias, se me han escapado unas gotas de agua de la botella, que han hecho las veces de lágrimas. Un ritual hecho a la medida y catadura del personaje.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Una escena en apariencia excéntrica si no fuera porque después de hacer números, he llegado a la siguiente conclusión: todos tenemos más muertos vivientes que difuntos reales. Sin embargo nadie habla de los cadáveres vivos que va dejando por el camino. Pero mucho menos del cementerio en el cual se encuentran. La razón es obvia: el ser humano solo entierra a sus muertos, no a sus víctimas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hoy es un día de celebración, porque, siendo exepcionalmente optimista, puedo afirmar que he tenido la inmensa suerte de darme cuenta antes de tiempo, hecho que me permitirá irme un poco menos engañado de lo que me temo, haremos todos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La experiencia me ha hecho admirar aún más a todas esas personas vocacionales y solitarias que un día se dieron cuenta que la soledad elegida es mucho menos efímera, interesada y tóxica que las dinámicas que existen en las relaciones de grupos. Porque hay yenas humanas que se alimentan de las vísceras de su misma manada. Tal vez ese reconocimiento y esa constatación, sea una de las razones por las cuales, cada día me importa menos morir solo. Si eso supone hacerlo en paz y sin ningún sospechoso al lado, me iría desde luego más limpio y tranquilo.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
A lo largo de mi vida puedo decir que llevo alimentadas, varias manadas de yenas. Sus ataques nunca son solitarios. Para ello suelen tramar con alguna compañera su plan de ataque, después de marcar a su presa. Suelen elegir la noche o las oscuridades del día para emitir esos aullidos-ladridos, tan peculiares y característicos, que se parecen a los de una risotada macabra humana; gritos gracias a los cuales mantienen la cohesión de la manada. Esa es la forma que tienen de "llenar" su estómago, y la actividad a la cual se ven en la necesidad de recurrir, con objeto de dotar a su vida de su mayor sentido.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Nada pues de lamentos. Me considero un ser privilegiado. Gracias a la calidad de mis proteínas, tan demandadas como enriquecedoras, para estos tiernos y adorables animalitos, hoy puedo seguir escuchando los cuchicheos y chillidos que emiten, mientras devoran mi carne y rebañan, como buenas carroñeras que son, mis huesos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y eso, para un amante de los animales, constituye una obra de amor inconmensurable, gracias a la cual, consigo saciar su hambre de odio.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 10 de febrero del 2024. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-88860446351626200812024-01-31T01:04:00.008+01:002024-02-04T22:17:58.108+01:00Amor o interés<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiGg37UNBTCvGGnmWlKGkbD2Fl3bvcsG_-LzsRnaWOlpNsViNW0vleU4fip5-_qzEpI0mzSTh574jX44LSzKlA8EM9YpeLYamZuRg5Sc22BUohHxgMsVAnIwn96ix_lp7Uk0uq5nmAInzDQbte3J6mIQqn7PxmtJEMBeS0kIa0nBNTutTxyCYEHzQDubvw/s1600/POR%20AMOR.png" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="394" data-original-width="350" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiGg37UNBTCvGGnmWlKGkbD2Fl3bvcsG_-LzsRnaWOlpNsViNW0vleU4fip5-_qzEpI0mzSTh574jX44LSzKlA8EM9YpeLYamZuRg5Sc22BUohHxgMsVAnIwn96ix_lp7Uk0uq5nmAInzDQbte3J6mIQqn7PxmtJEMBeS0kIa0nBNTutTxyCYEHzQDubvw/s1600/POR%20AMOR.png"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Todavía hay algunos que sostienen que es el amor, y no el interés propio, el que mueve el mundo</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Frank Cuesta ha vuelto a nacer. Hace unas horas ha sido atacado por un ciervo que le ha clavado una de sus astas en el estómago. Las imágenes son bastante duras, como él mismo reconoce. El vídeo está subido en YouTube. El más completo que he visualizado en su totalidad, está editado por Libertad Digital.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Al parecer el ataque a Frank, se ha producido porque es época de celo, y los animales en estas fechas tienen sus propios códigos y se vuelven más territoriales y protectores con respecto a sus hembras. Una vez ha sido cogido, ha logrado a durísimas penas, sacarse el asta, hecho que le ha costado al menos cinco minutos. Una vez ha logrado desprenderse del asta, ha procedido a coserse él mismo la herida. Me alegro que haya salido con vida de esta. Aún me encuentro impresionado por los hechos y las imágenes.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Segundos después de publicarlo, he decidido eliminarlo, con objeto de no dañar la sensibilidad de algunas personas, que últimamente muchos se escandalizan ante cualquier nimiedad, del tipo que sea. Aunque ante los asuntos importantes, como los relativos al sufrimiento de la gente, muestran su indiferencia, como buena gente que son.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y todavía hay algunos que sostienen que es el amor, y no el interés propio o el deseo que preconizaba Buda, el que mueve el mundo. Porque cuando la pobreza entra por la puerta, el amor no salta por la ventana, ¿verdad...? Supongo que se refieren al mismo amor que ha "movido" al hombre a perpetrar los horrendos acontecimientos que han quedado escritos en la Historia y que continuarán escribiéndolos por los siglos de los siglos...
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Por eso existen tantos países en el mundo y se siguen fabricando armas. Por eso existen más relaciones comerciales que desinteresadas entre los distintos países y personas. Y por eso está tan bien repartido el mundo, gracias al amor que los ricos profesan a los pobres. Por eso la avaricia mundial es superior a la solidaridad. Por eso siguen predicando algunos que nos amemos los unos a los otros, mucho más de lo que nos amamos a nosotros mismos (excluyendo a los animales y a las plantas, que aunque son hijos de Dios, no son hermanos de los hombres). Amén.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Porque el hombre cuida de su planeta, de sus mares y de su aire gracias al amor que siente por sus hijos y por él mismo. Y tala bosques enteros sin importarle la vida de sus descendientes directos que viven en el interior de los mismos ecosistemas por la inconmensurable compasión que sale de su pecho. Y mata por matar, gracias al amor que siente por su insoportable aburrimiento.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El amor mueve el mundo, dicen. Aunque curiosamente, la frase toma un significado más real, cuando se construye a la inversa. Es la tierra, la que a pesar de la brutalidad a la que continúa sometida por el hamor-erectus, sigue proporcionando a este, agua y alimentos, gracias a los cuales puede seguir viviendo. Un amor que de ser justo no debería ser eterno.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Porque es difícil elegir entre el amor que los israelitas profesan a los gazatíes, el que los rusos demuestran a los ucranios, el que los nazis derrocharon con los judíos, el que algunos países han demostrado con sus guerras civiles, entre ciudadanos de una misma nación, o el que se continúa profesando en los distintos conflictos motivados por prejuicios ideológicos, territoriales, pasionales, económicos, personales, religiosos o de cualquier otra índole.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Así es, en resumidas cuentas, la sociedad que estamos construyendo: mueve y polariza más el odio que el amor. Da la impresión que la toxicidad es más enriquecedora para los intereses personales de algunos que la pureza de lo auténtico y de lo bueno podría ser para todos. Que es más apetecible una ración de emociones envenenada y tóxica que una relación saludable, libre y exenta de comentarios despectivos y previamente intoxicados, con tal de desconectar y de salir de la monotonía social en la que algunos viven instalados. Un caldo perfecto para establecer relaciones de confianza, de calidad, enriquecedoras y duraderas en el tiempo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Incluso todavía hay individuos que se extrañan de que muchas personas permanezcamos solteras. Bienaventurados los solteros porque al menos estamos libres de ciertos prejuicios y condicionantes, si exceptuamos las envidias naturales y comprensibles que lógicamente despertamos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lo que realmente asombra es que nadie haya calculado la suma de personas separadas, divorciadas, solteras, y de aquellas que viven en régimen de parejas de hecho, para ver si hay más solteros, casados, y, de paso confirmar, si realmente los raros son los solteros o los casados, que después de separarse, deciden volver a casarse, es decir, a anularse a sí mismos y a sus parejas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y yo que pensaba que ya no quedaban románticos en el mundo...
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 30 de enero del 2024.</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-18751141698441705622024-01-16T00:42:00.022+01:002024-01-19T14:41:18.997+01:0010º aniversario<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEis4pQQ6SJqWO9-DOlbP8Me_EcWHcJk3FwftHzOkNzGkfojg0v2LVoKvsVIg6dUpPPrZTdnOr6nps2GfLFrOO0nd-fqseLd6zk-y3ubOy-NDTNNQrnfKBLBYrDY9O1DpcYCP5my3NFDxAJBWpFEbjJcWjzFjsDlpK6KUF4wB4rWjeZfK24wFzlCBE7CV3k/s1500/X%20ANIVERSARIO%20CANVA.png" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" width="1100" data-original-height="1000" data-original-width="2000" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEis4pQQ6SJqWO9-DOlbP8Me_EcWHcJk3FwftHzOkNzGkfojg0v2LVoKvsVIg6dUpPPrZTdnOr6nps2GfLFrOO0nd-fqseLd6zk-y3ubOy-NDTNNQrnfKBLBYrDY9O1DpcYCP5my3NFDxAJBWpFEbjJcWjzFjsDlpK6KUF4wB4rWjeZfK24wFzlCBE7CV3k/s600/X%20ANIVERSARIO%20CANVA.png"/></a></div>
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Estimados lectores:</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los aniversarios son fechas que celebramos para commemorar algún suceso. Al hacernos partícipes de dichos acontecimientos, les dotamos de un significado especial. Hay aniversarios tristes, alegres y emotivos. Estos últimos están formados por una mezcla de ambas emociones. El aniversario que hoy se cumple es especialmente emotivo. Es emotivo y triste por la pérdida de dos de sus colaboradores, y, es alegre, por haber podido llegar a cumplir estos diez años.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero la mayoría de los aniversarios suelen ser injustos, porque muchas de las personas y seres que contribuyeron en su día a que esos sucesos tuvieran lugar, suelen quedar esos días de celebración o de conmemoración, en un segundo plano.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Las personas que me conocen, saben que no me gusta posicionarme por encima de mis obras. Y mucho menos aún, por encima de mis colaboradores y lectores. Una prueba de ello es que no he presentado ninguno de mis dos libros publicados hasta la fecha. Y no lo hice en su momento por varios motivos más. En primer lugar por pereza, en segundo lugar por timidez. Y en tercer lugar porque pienso que son los libros los que tienen que hablar de su autor y no al revés.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El 16 de enero, La Pluma celebra su X aniversario. Ese día fue abierto desde una Biblioteca Pública, la Biblioteca Pública Municipal, Dámaso Alonso de Madrid, gracias a los ánimos de algunos lectores y lectoras bibliotecarias, pertenecientes a dicha biblioteca. Lo escribo en números romanos, porque una década, creo que es un tiempo más que considerable. Por ese motivo, se han actualizado los colores de las portadas de los blogs, de las redes.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Creo que don Miguel debe de estarme muy agradecido. Porque durante estos diez años, le he homenajeado y he dado a conocer, una de sus citas, con la cual he demostrado estar muy identificado: “La pluma es la lengua del alma”. Una muestra de ello es que la inmensa mayoría de publicaciones y poemas los escribo con pluma estilográfica, y, uno de los blogs, está pergeñado a mano.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Durante estos diez años, 120 meses o 3.650 días, los lectores han podido evidenciar a través de las distintas publicaciones, las tres almas o plumas de las que consta La Pluma en ristre, y que están representadas por los colores rosa, azul celeste y turquesa. De esta forma, La pluma roja nos ha ido aportando su punto de vista de algunos acontecimientos sociales, la pluma verde o ecológica y animalista ha puesto voz a los seres más débiles que no pueden defenderse, y la pluma azul o genérica, nos ha ofrecido sus textos, a través de sus distintos géneros.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Como pueden ver, me incluyo como lector. Porque cada vez que alguna de las plumas publica algún artículo, soy el primero en leerlo, antes de darlo a conocer. Y porque antes que escritor, uno es lector. No es posible concebir por lo tanto, la escritura sin la lectura, ya que ambas se complementan.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hace diez años, en un día como hoy, me encontraba en la sala de ordenadores de aquella biblioteca. La sensación que experimenté al conectarme aquel día al blog, tuvo algo de mágica. Pero pronto me di cuenta que lo difícil vendría después, como era el llenar de contenido o “dar de comer”, con cierta regularidad, a aquella criatura.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y es que tener un blog guarda cierta similitud con el hecho de ser padre. Un padre tiene que relacionarse con su hijo, hablarle y vestirle. Y tiene también la obligación biológica y moral de sacarle adelante a pesar de las dificultades. En cierta forma hoy me place compartir con todos ustedes esta sensación que aquel día no estaba seguro de llegar a cumplir.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No sé si he incumplido mi última promesa con mis lectores de Facebook, al haber cambiado recientemente la cabecera de este blog. Pienso que no, ya que he mantenido los colores y el diseño prometidos hace unos días con todos ellos. No obstante, me someto al dictamen y en su caso al castigo de todas mis lectoras y lectores. De ser así, quedo a la espera de que me notifiquen a qué plaza pública he de acudir para someterme a dicha humillación pública.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Agradezco de corazón a todos los caballeros y damas enristradas su adhesión inquebrantable a esta pluma. Sin todos ustedes o vosotros (creo que después de tanto tiempo ya podemos tutearnos), no hubiese sido posible esta pequeña ilusión y este apasionado proyecto.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No puedo olvidarme como decía al principio, en una fecha tan marcada y significativa como esta, de todos aquellos seres que han inspirado y colaborado con La Pluma en Ristre, y, que han mostrado su fidelidad inquebrantable con este proyecto, hasta el final de sus días. De mi querido Antonio Fraguas (<a href="https://www.forges.com/">Forges</a>), que tuvo la gentileza de ceder a este blog viñetas de una forma desinteresada. Y de Kutxi, mi adorable amiga, compañera, musa y amante canina, Directora Adjunta y de La Pluma Verde, verdadero germen de esta bitácora.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y por supuesto de todos vosotros, lectoras y lectores de LPR que con vuestras visitas y lecturas seguís infundiendo esos ánimos y esa energía que todo escritor (y lector) necesita a la hora de sentarse ante este auditorio virtual. Solo siendo consciente de que hay lectores que van a leer mis líneas, he sido capaz de escribir y de mantener este compromiso con vosotros y conmigo mismo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Les (os) agradezco desde lo más profundo de mi alma y de mi corazón, esta compañía, que sin conocernos, hemos sido capaces de mantener en la distancia, durante tantos años. Espero seguir contando con la confianza de todos ustedes.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Besos y abrazos de este humilde admirador:
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
✍️
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
José Luis Meléndez
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 15 de enero del 2024. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-64005702940991954512023-12-26T11:20:00.030+01:002023-12-28T23:33:04.487+01:00Espíritu navideño<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCMcYragIJrAobnDXwOEOaY-SWQXi0j6z68TEAGGyxIN6qtB36Woxk7nNA_OKhyEz29w2KS0mCNQYHU4yBJ3oAvP2lOSdFL0l7cIzGxp5PqAVo1ltvG9QXFHBXjHoprPKC561aXKjlEuFE3V4jqRApu2od979rsQGh2naw7S6lvn1TX68e-AyDnKQixuc/s1600/espiritu%20navide%C3%B1o.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCMcYragIJrAobnDXwOEOaY-SWQXi0j6z68TEAGGyxIN6qtB36Woxk7nNA_OKhyEz29w2KS0mCNQYHU4yBJ3oAvP2lOSdFL0l7cIzGxp5PqAVo1ltvG9QXFHBXjHoprPKC561aXKjlEuFE3V4jqRApu2od979rsQGh2naw7S6lvn1TX68e-AyDnKQixuc/s1600/espiritu%20navide%C3%B1o.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Espíritu navideño es saber ponerse al lado de los que sufren</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me pregunto, en estas "fiestas", si todo el despilfarro inmoral gastado en comidas excesivas y ostentosas, loterías que nunca tocan, o regalos innecesarios y/o superfluos lo donásemos a una institución de reputada seriedad que se comprometiese a certificar ante notario, que el destino de cada una de esas partidas llega a sus destinatarios, a través de los medios de comunicación.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
O si donásemos directamente ese dinero a las personas que vemos todos los días del año, que viven en condiciones infrahumanas, apostados en las calles. ¿No estaríamos contribuyendo de veras a un mundo más humano y solidario, en lugar de hacerlo a través de deseos impostados, que para más inri, nunca llegan a cumplirse?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Según la <a href="https://acortar.link/SLr1iA">OCU</a>, los españoles gastaremos estas Navidades, 745 euros. Suponiendo que la cifra fuese la mitad, pongamos 400 euros extras, si restamos el número de niños y adolescentes y consideramos que España tiene 40 millones de habitantes, en lugar de los 48.446.594 actuales, el presupuesto ascendería a 16.000.000.000, es decir, dieciséis mil millones de euros, el presupuesto equivalente a un ministerio. Faltaría multiplicar esta cifra por los países que celebran la Navidad. Supongamos que son cien. Nos daría una cifra de 1.600.000.000.000, es decir, de mil seiscientos millones de euros, dinero suficiente para acabar con el hambre en el mundo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Desear felicidad exclusivamente en una etapa del calendario, es una hipocresía. La felicidad no hay que desearla, hay que procurarla material y espiritualmente. Y si los deseos manifestados no se corresponden con los hechos, nos encontramos ante un flagrante caso de hipocresía social.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me conformaría si empezáramos a invertir ese capital con personas con las cuales nos unen auténticos lazos de amor y de amistad. Con ello estaríamos consiguiendo algo inaudito: ser sinceros con nosotros mismos y los demás en estas fechas. Sería un bonito comienzo para dejar de establecer relaciones frígidas, carentes de emotividad y afecto. Relaciones más impuestas por el calendario que nacidas de la naturalidad y la espontaneidad.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Resulta anacrónico ver en una democracia, como hay personas que están deseando que llegue la Navidad, para someterse durante treinta días, a las cuatro dictaduras de las que consta esta etapa del año, como son su dictadura social (hay que relacionarse), espiritual (hay que asistir a los oficios), económica (hay que consumir más que durante el resto del año) y gastronómica (hay que comer y beber los mismos productos que impone el ritual).
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hace tiempo me di cuenta que el espíritu navideño no es un espíritu sano. Es un espíritu que está corrompido, que no es consecuente con el mensaje genuino de estas fechas, como es la práctica de los valores espirituales y morales sobre los materiales. Que no es un espíritu libre. Por eso aún, me sigue sorprendiendo la forma en la que la gente celebra las fiestas, que para más inri, son impuestas.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Celebrar el espíritu de la pobreza en medio de tanta ostentación considero por tanto que es una incuestionable aberración ante el pobre recién nacido. Es una falta de educación y una cruel humillación hacia todas las personas que como consecuencia de la guerra, de las catástrofes naturales, del hambre y de tantas y tantas calamidades no tienen ni medios ni fuerza moral para celebrarlas. Mucho menos constituye un gesto de amor y de paz, como se preconiza desde los altares.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero la Navidad no solo tiene sus víctimas humanas, formadas por aquellos que de forma indirecta se ven inducidos a celebrarla, también tiene sus víctimas mortales, como todos aquellos que mueren en los desplazamientos. Y no podemos olvidarnos de la cantidad de animales y de seres vegetales (que también son prójimo e hijos del creador), que se sacrifican en estas fechas para saciar de manera exclusiva nuestra desproporcionada y desmedida gula navideña.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La Navidad, más que alegre, pienso que debe inducir a la reflexión. A una reflexión que no tiene que ser espiritual necesariamente. Puede ser también una introspección personal. Admiro por tanto a todas aquellas personas inteligentes que para divertirse no necesitan armar jaleo ni mantener en vigilia a los vecinos. Que son capaces de exteriorizar sus estados de ánimo de una forma civilizada y que respetan la Nochebuena de los demás no condenándolos a pasar una “mala noche”. Que saben diversificar su tiempo con distintas actividades a través de paseos, lecturas, tertulias, juegos de mesa, películas, vídeos o fotos familiares para fortalecer los lazos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ese tipo de personas molestas y tóxicas a las que me refería anteriormente, carecen por completo de espíritu navideño. El espíritu navideño nunca es egoísta, ni antepone los derechos de uno sobre los del otro. Cabe imaginarse la de cosas que serán capaces de hacer durante el año, las personas que en tiempo de navidad, actúan así ante los más cercanos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Muy al contrario, existen personas admirables, que en estas Navidades, sin seguir ninguna religión, motu proprio abren su proceso interior para reflexionar y pensar como pueden ayudarse a sí mismos y a los demás. Pero reconocer el marcado carácter espiritual de estas fechas no implica desatender el aspecto intelectual. Porque preguntémonos: ¿qué es un espíritu sin intelecto? Es como un cielo sin sol, o como una lámpara sin una bombilla.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La forma en la cual se celebra la Navidad atenta contra su propio significado etimológico. Si la Navidad es sinónimo de nuevo (buena y nueva), ¿cómo es posible que se celebren todas las navidades con los mismos productos, con las mismas personas, con los mismos rituales?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
He reflexionado sobre este aspecto y he llegado a la conclusión de que el problema nace cuando esa festividad cristiana pasa a convertirse en una tradición social. Ahí pierde todo su significado espiritual. No es el hombre el que tiene que adaptarse a la Navidad, es la Navidad la que tiene que adaptarse a los tiempos actuales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La opulencia es la farsa macabra de la fiesta de la pobreza, que es la Navidad. Celebrar con nuestra alegría, la tristeza, la miseria y la penuria de una mayoría de personas que habitan en infiernos terrestres, es celebrar desde el cielo, la existencia misma del infierno. La opulencia propia de estas fiestas constituye una humillación a muchas almas que merecen y esperan una mirada empática, un gesto con el cual puedan sentirse sino identificados, al menos comprendidos, acompañados y no despreciados.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Cuando uno vive en el infierno ya no teme nada. Lo único que desea es la muerte, la nada, el no ser, que es lo mismo que el no sufrimiento. Occidente vive en un infierno moral. Desde esta parte del mundo se exportan armas para bombardear a inocentes. Ellos, sus autores, dudo si conocen que ya, antes de morir, han entrado en ese infierno moral, antesala del infierno real. De esa forma sibilina, dicen que actúa Lucifer.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
A veces pienso si todos estos psicópatas que bombardean a miles de personas, se han planteado en algún momento de sus vidas, la existencia de ese infierno del cual ya no tienen salida. Porque ni suicidándose podrán librarse de él. Y termino pensando que sí, que ya conocen su destino. Por eso optan por seguir adelante, sabedores de que nada ni nadie puede librarles de semejante castigo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si uno considera los miles de infiernos que han dejado en la tierra podemos imaginarnos las decenas de miles de infiernos que les esperan. Aprovechar bien lo que os queda de vida, muchachos. No vais a volver a saber nada de lo que es vivir dignamente, ni de los vuestros, en mucho tiempo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Que Dios, según dicen, sacrificara su vida para ver como se corrompe su mensaje de amor y su vida, en lugar de ver muestras de solidaridad con respecto a los más necesitados, o a la gente atiborrarse cuando se le da la oportunidad de todo lo contrario, sin pensar más que en ellos y en los suyos, es no de juzgado de guardia, sino de juicio final.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La Navidad es algo más que montar un belén o talar un árbol. Es contagiarse de los valores de la pobreza y de la generosidad que ofrecen esos increíbles seres que purifican nuestro aire, haciéndolo más sano y respirable. Que nos cobijan bajo sus brazos ramificados y nos ofrecen sus frutos cuando los necesitamos. Que nos esperan cada día en el mismo lugar, sin separase nunca de nosotros.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La mejor forma de “adorar” al niño es hacerlo desde adentro hacia afuera, como lo hace el manantial que brota después de saciarse a sí mismo, y es capaz de ofrecer su agua a todos los seres. La Navidad debería ser tiempo, como su nombre indica, de renovación interior. De ese interior desde el cual podemos cambiar el mundo, igual que el manantial puede cambiar con su curso su paisaje creando nueva flora y atrayendo a más fauna.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La Navidad es algo más que montar un belén o un árbol. Es contagiarse de los valores de la pobreza y de la generosidad que ofrecen esos increíbles seres que purifican nuestro aire, haciéndolo más sano y respirable. Que nos cobijan bajo sus brazos ramificados y nos ofrecen sus frutos cuando los necesitamos. Que nos esperan cada día en el mismo lugar, sin separase nunca de nosotros.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Es algo más que estar con la familia y los amigos, porque es Navidad, y no porque sale de adentro. El espíritu navideño, es mucho más que eso: es saber ponerse al lado de los que sufren. Y muchas personas, especies vegetales (incluidos los árboles que se talan) y animales, sufren más en estas fechas por culpa nuestra.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 25 de diciembre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-3621323058983462142023-12-19T00:05:00.038+01:002023-12-22T15:30:29.557+01:00Dinero o cariño<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgO3IfHN9g6KZadglqyFvFWQawPteCNJMMsy4rH43vsWyzEoG4aAWl93Tcs1kkM5X5hSH_fsw9k7B7Vt0XM19Z4eWl1KEa0pCZCLBClSOS7bex9TKOUXaQBb0qw02PuwAK7AEZ5rdTLhHcl8DunTILxJdS_RzpF2_pFgsMqa-oTjorKoCJ0R1e7CMk7AvI/s1600/DINERO%20Y%20CARI%C3%91O1.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="584" data-original-width="960" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgO3IfHN9g6KZadglqyFvFWQawPteCNJMMsy4rH43vsWyzEoG4aAWl93Tcs1kkM5X5hSH_fsw9k7B7Vt0XM19Z4eWl1KEa0pCZCLBClSOS7bex9TKOUXaQBb0qw02PuwAK7AEZ5rdTLhHcl8DunTILxJdS_RzpF2_pFgsMqa-oTjorKoCJ0R1e7CMk7AvI/s1600/DINERO%20Y%20CARI%C3%91O1.jpg"/></a></div>
<b>Los animalistas prefieren recibir de sus mascotas cariño, los explotadores de sus animales, dinero</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Resulta asombroso ver como en el siglo XXI, aún existen colectivos que se erigen a sí mismos como representantes de la España rural y de la sociedad civil. Agrupaciones que pretenden que la sociedad actual siga viviendo con normas propias del siglo XIX.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El siglo XX fue un siglo de indudables avances en materia de defensa de los derechos de los animales. Aunque las primeras normas europeas se promulgaron en los años 70 como la Convención Europea para la Protección de Animales en explotaciones (1978), no fue hasta 1998 cuando entró en vigor la directiva de la protección de los animales en explotaciones ganaderas, que establecía aspectos generales para la protección de otras especies (peces, reptiles, anfibios..). Directiva basada en la Convención anteriormente descrita.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
En el siglo XXI, la Unión Europea, sigue apreciando y siendo consciente de la creciente sensibilidad de la sociedad con respecto a los animales, por ello ha continuado trabajando para mejorar la vida de todos ellos. Una muestra es el Código de Protección y Bienestar Animal (BOE 25/10/23) y la concienciación que existe en Europa en materia de bienestar animal queda manifiesta en una encuesta del Eurobarómetro: el 82% de los participantes respondieron que el bienestar de los animales de granja debería protegerse mejor.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hace unos días, concretamente el 12 de diciembre se reunieron cerca de 20 colectivos en Santander, según ellos, para alzar la voz contra el animalismo. Pero cuando uno lee las <a href="https://www.larazon.es/cultura/toros/espana-rural-reune-santander-alzar-voz-animalismo_202312126578a9c462c50d0001ccdee8.html">declaraciones</a> que se vertieron en dicho encuentro se da cuenta que en realidad tenía otros fines añadidos, como es el activar el enfrentamiento entre la España rural, que al parecer es de ellos y no de todos los españoles, con el mundo urbano. Pero sobre todo para defender sus formas de vida (eufemismo de negocios de explotación animal). En resumidas cuentas, sus costumbres y tradiciones empresariales, que a su vez son, según ellos, también culturales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hasta ahora uno creía que la cultura estaba basada en la creatividad y que por tanto eran necesarias unas mínimas dosis de sensibilidad o de una cierta aportación intelectual por parte de sus actores. Pues resulta que no. Así que podemos hablar de las culturas de la tortura y del sufrimiento llevadas a cabo en “festejos” taurinos o fiestas populares, en las cuales se sigue maltratando animales. Muchas de ellas en el mundo rural en el que al parecer todos los asistentes viven.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
De esta forma tuvieron que promulgarse leyes para que muchos de los tenedores de animales y mascotas, gracias a los defensores de los animales (animalistas), se preocupasen un poco de sus propios animales (la cultura y la responsabilidad, ya ven, no siempre van unidas). Pero lo que más llama la atención es que dichos colectivos tan preocupados por la conservación de los montes, tampoco llevan a cabo actividades encaminadas a fomentar la cría de especies en peligro de extinción en la España rural en la que ellos al parecer viven. Y en consecuencia tienen que ir desde las ciudades agrupaciones animalistas y ecologistas a preocuparse también de ellas, corriendo de su bolsillo todos los gastos. Algo parecido a los pirómanos que no repueblan el bosque. Con una diferencia, al menos estos, se van con las manos vacías.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Así de malos son los animalistas que describe Manuel Gallardo, Presidente de la Real Federación de Caza, Pedro Barato, Presidente de ASAJA, o Victorino Martín presidente de la Fundación Toro de Lidia: “Es un orgullo estar rodeado de personas que han hecho de los animales el centro de su vida (negocio) y de su cultura (tradición familiar) y que están dispuestos a defender esa forma de entender el mundo (empresa)”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Asegura el señor Gallardo que en las ciudades se sabe poco o nada del verdadero trato a los animales. Como si no fuésemos conscientes en el mundo urbano de la existencia de ningún matadero, ninguna plaza de toros, ninguna armería, ningún circo o ninguna carroza tirada por animales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El animalismo según el presidente de ASAJA, Pedro Barato, es “una utopía destructiva que no solo pone en peligro la civilización humanista, sino que también amenaza la continuidad de los paisajes rurales y la relación histórica entre humanos y animales”. Porque son los animalistas los que mandan el ganado a los mataderos, los que salen al campo a matar animales en lugar de a rescatarlos, los que torturan antes de matar a los toros o los que velan por la totalidad de especies, incluidas las que son de su responsabilidad. Son tan destructivos los animalistas que gracias a ellos hoy existe una normativa que vela por todos los animales, incluidos los de todos los colectivos congregados.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Afortunadamente los paisajes, las ganaderías y las civilizaciones siguen existiendo y teniendo más vida, gracias a las personas que se preocupan de defenderla. Incluso los animales son más agradecidos y productivos si se les trata dignamente, como ha quedado demostrado. La cultura también se demuestra en el trato con los animales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Utilizar a los animales urbanos como son las mascotas en comparación con los animales de trabajo, es algo absurdo y a la vez perverso. Dice el señor Gallardo que hay que querer más al perro que al hijo. Normalmente un perro suele querer más a sus tutores que lo que un empresario quiere a sus reses. Quizás sea porque sabe devolver el cariño que se le dispensa, cosa que no suele ocurrir cuando el señor Gallardo sale a matar animales. No tiene la culpa el mascotismo: el animal solo es el reflejo del trato que recibe. Aunque entiendo y respeto que el señor Gallardo quiera más a los animales muertos y no contento con su proeza asesina, luego se los coma.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Con las mascotas es posible mantener relaciones profundas porque son relaciones desinteresadas. En lugar de obtener un beneficio económico el tutor de un animal doméstico es capaz de demostrarle su cariño, desembolsando importantes cantidades de dinero, sin necesidad de explotarle con objeto amortizar dicha inversión económica. Los animalistas prefieren recibir de sus mascotas cariño, los explotadores de sus animales, dinero.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Un ideólogo especista e involucionista del siglo XIX, nunca podrá entablar una relación de amistad con un animal porque sus prejuicios supremacistas le impiden situarse a la misma altura de cualquier especie.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El problema no es el concepto de animal que existe en las grandes ciudades, es el concepto mercantilista y utilitario con el que se adquieren no animales, sino bestias de trabajo que no reciben, no ya el cariño que se les dispensa en las ciudades, sino unas mínimas condiciones de existencia. Mientras que los especistas prefieren explotar a bestias (animales sin derechos), procurándoles una existencia más corta y penosa, los animalistas se relacionan con las distintas especies como seres sintientes con objeto de mejorar y prolongar su calidad vida.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
De las mascotas se aprenden valores como la empatía, la fidelidad, el amor incondicional. Valores que luego repercuten positivamente en la sociedad. Basta con leer un poco para darse cuenta de los beneficios que aportan las mascotas a la sociedad (rural y urbana). ¿Qué valores aprende un empresario de sus animales si no es capaz de invertir un mínimo de su cariño en su trato y en su psicología?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Reconocer derechos básicos de los animales no significa, equiparar animales y humanos, significa dotarlos de unos mínimos (no iguales) derechos. No se trata por tanto de “destruir” el legado cultural. Las sociedades desarrolladas a lo largo de la Historia avanzan gracias a los cambios sociales. Las tradiciones y las costumbres no son eternas. Las culturas también cambian. Y las “culturas” de la explotación y del sacrificio animal no son una excepción. Las leyes son iguales para todos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La cultura real fomenta la ética y la moral. Lo que es extraño es ver como el especismo con sus prejuicios discrimina a los animales “inferiores” y que sean incapaces de demostrar su superioridad moral a la hora de apoyar y defender con derechos, a los seres más débiles y desvalidos. Eso no es cultura, es clasismo sectario.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El especismo puede convivir perfectamente con el animalismo. Uno puede pensar o creer (sin dar la oportunidad a los animales a que demuestren sus capacidades), que algunos animales son especies inferiores, pero eso no es excusa a la hora de defender sus derechos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La involución y el inmovilismo de las tradiciones y de las costumbres nos retrotrae a siglos pretéritos. Las costumbres con el paso del tiempo se convierten en imposiciones desfasadas y absurdas. ¿Es señal de cultura y de ética, la tradición de comer carne de toro torturado?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La RAE define <a href="https://dle.rae.es/cultura">cultura</a> como: “Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc.”. Según esta definición podría ser cultura el canibalismo (costumbre y tradición de algunos pueblos), ya que no es necesario tener ningún tipo de valor ético o intelectual. O puedo hacerme musulmán y eructarle a cualquiera en la cara y quedar perfectamente como un hombre culto (al parecer tampoco es necesario ser educado para ser culto). Es más, los animales, menos mal que lo reconoce la RAE, también tienen su cultura, ya que tienen sus costumbres y sus modos de vida.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
De la misma forma, un forofo que acude a ver a su equipo, siguiendo su "costumbre" y "tradición", es más culto que otro que en el mismo tiempo escribe o lee de forma esporádica en su casa. Solo hace falta crear o seguir una tradición o costumbre para convertirse en el acto en hombres "cultos". Da lo mismo que no haya leído un solo libro en su vida. Aunque no sepa leer ni escribir, puede ser igual de culto que el que sigue una tradición o costumbre. Por ejemplo: un hombre que tiene la costumbre de ir a la taza del servicio en su casa es más culto que otro que hace un pis ocasional en una cafetería.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hablan de respetar las tradiciones aquellos a los que les cuesta o se resisten a acatar las leyes de bienestar animal. Y hablan de relaciones entre hombres y animales y no de los animales con los hombres. ¡Curioso! Es más, reniegan de las “imposiciones ignorantes” provenientes de las ciudades, pero se arrojan el derecho a criticar desde el mundo rural, desde el cual parece que hablan, el “sumiso mascotismo” que según ellos, existe en las ciudades.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hablan de "ideología" animalista pero no se quejan de la "ideología" fotovoltaica ante la cual se muestran sumisos y cuyo origen se centra en las grandes “ciudades ignorantes”, a las cuales luego acuden a vender sus productos. O de la energía eólica que ha cambiado para bien los paisajes a los cuales se refería el señor Barato, y con la cual si que parece estar contento. ¡Qué desastres está creando la ecología y el animalismo en el mundo rural! Menos mal que las palabras del señor Barato, presidente de ASAJA, no son semillas, porque si no, nos hubiera dejado un árido y deprimente paisaje de esos que tanto le disgustan y que tanto le angustian.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Expongo el artículo 13 del Título II del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea: “La Unión y los Estados miembros tendrán plenamente en cuenta las exigencias en materia de bienestar de los animales como seres sensibles”. Dan escalofríos pensar en cómo algunos animales se ven obligados a vivir (que no a convivir), con algunas personas que tienen menos sensibilidad que ellos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 18 de diciembre del 2023. Fuente de la imagen: imagen cedida por la gentileza de Susana del Hoyo.</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-20058720998789289182023-12-12T20:13:00.002+01:002023-12-12T22:31:37.162+01:00La reconciliación<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEivY_PfhtpNuA2aPQMc7CgVyboRcIRgJUaNSssr0Qr4gnanmbJDQ6bG4chJXRizYOx0D3Z1JEGaRCwn845guVpVWr24scEuKrIH3OfgjRfLGL-Y38S-SKxgmq1JNUnCSerk0IVTaQJ-zkvINmDV0W5xTdfMOB_sF1LiIWlFUInYEdgVOogvRaMJoc6tBBU/s1600/La%20reconciliaci%C3%B3n.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="549" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEivY_PfhtpNuA2aPQMc7CgVyboRcIRgJUaNSssr0Qr4gnanmbJDQ6bG4chJXRizYOx0D3Z1JEGaRCwn845guVpVWr24scEuKrIH3OfgjRfLGL-Y38S-SKxgmq1JNUnCSerk0IVTaQJ-zkvINmDV0W5xTdfMOB_sF1LiIWlFUInYEdgVOogvRaMJoc6tBBU/s1600/La%20reconciliaci%C3%B3n.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>La normalidad me ha vuelto a reconciliar con la vida</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Suena el despertador. Son las siete y media de la mañana. A las nueve tengo cita en el centro de salud con mi atractiva doctora de “Atención Primaria”. Nunca mejor dicho... Un buen motivo para levantarse, acicalarse e ir como un pincel a la cita médica, si no fuese porque desde hace seis larguísimos meses he esperado una ecografía urológica en la sanidad pública madrileña.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hoy se cumplen quince días desde que me hicieron aquella prueba en la cual pude comprobar en el monitor una figura geométrica de forma circular, dotada del poder suficiente de levantar en la mente y en el estado anímico de uno las correspondientes suspicacias. Suspicacias que nunca llegaron a convertirse temores.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Seis meses y quince días en los cuales uno se ve abocado a considerar todo tipo de escenarios, tanto vitales como ultra existenciales. Seis meses y quince días en los cuales uno entra y sale de esa neblina con la misma incertidumbre pero con la creciente preocupación de “ y si…”, como consecuencia de una pérdida de peso de tres kilos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Para colmo, o quién sabe si como protección, la niebla de esta mañana, envuelve mi cuerpo y mi alma en este día gris. Un paisaje también típico a la hora de ser el destinatario de un mal presagio. Un escenario propicio para recibir cualquier noticia capaz de estremecer a cualquiera. El terror suele venir después del susto, cuando uno tiene que despedirse por unas horas de sí mismo a la hora de la anestesia. Y quizás la tranquilidad llega al final cuando a uno no le da tiempo a despedirse de nadie.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Nada más salir del trasiego de la clínica privada en la cual me realizaron la ecografía, eufemismo de manoseo abdominal, me puse como un loco a buscar en internet resultados de ecografías urológicas. Tuve la gran suerte de dar con una de similares características a la mía, la cual compartí en mis redes sociales. Aposté a que se trataba de un quiste en un riñón. Más tarde pregunté a algún familiar y me confesó que otros parientes míos también lo tenían y que no requería intervención.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero esa imagen que aprecié en el monitor y que se quedó fija al final de la prueba y en las neuronas más recónditas de mi cerebro, era solo uno de los posibles síntomas o dolencias que podía tener, ya que no eran visibles el resto de tomas que me realizaron por espacio de un cuarto de hora.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ya hoy, en la sala de espera del centro de salud, me sorprendo a mi mismo de la tranquilidad y entereza con la que he llevado estos seis meses y quince días. Después de unos instantes he comprendido el por qué. Han sido ciento noventa y cinco días y ciento noventa y cinco noches en las cuales uno ha manejado todo tipo de escenarios. La vida o tal vez la muerte me ha cogido con lo más importante dicho y hecho. Y ese es el mayor impulso con el que uno puede irse. La vida, al fin y al cabo, es mucho más cruel que la muerte. No hay porqué preocuparse. Tal vez la preocupación sea la de seguir viviendo. La de seguir disfrutando un tercio a cambio de tres cuartas partes de sufrimiento.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Intento cambiar de escenario mental. La doctora está a punto de salir y no quiero entristecer su bello semblante. Aprovecho para recordar los tres motivos de la consulta. Instantes después se abre la puerta y pronuncian mi nombre. No es mi doctora titular, es la doctora suplente.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Después de presentarse y de excusarse por la ausencia de mi doctora, en contra de mis previsiones, conduce la conversación de una forma amena y a la vez receptiva, lo cual agradezco, ya que me ahorra exponerle el motivo principal de la cita (bueno, el segundo, el primero podría haber sido el hablar con mi doctora).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El informe médico concluyente ha sido coincidente con las investigaciones personales que llevé a cabo, en su día, horas después de salir de la clínica. Los hipotéticos tumores han resultado ser quistes renales e inofensivos. Y la cirugía, que en su día fue descartada de una forma provisional, pasa a serlo de una manera definitiva. Al menos por el momento.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La doctora suplente me ofrece un tratamiento para otra de mis insignificantes dolencias, pero ante mi falta de síntomas y de preocupación (tal vez interés mostrado) me pregunta si desea que mejor aplacemos tres meses el tratamiento y lo trate directamente con la doctora, ante lo cual asiento firme y fervorosamente con un : “¡sí, por favor!”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El karma parece haberse vuelto a poner de mi parte. Ya no será necesario vivir ni pensar con la misma intensidad con la que lo he hecho estos ciento noventa y cinco días. La normalidad me ha vuelto a reconciliar con la vida.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 12 de diciembre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-14493996619996239402023-12-03T14:56:00.024+01:002024-02-11T20:22:54.111+01:00Intervenidos<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhogLBzl1mpS7ohCSZAP73SJA4iGDfQ2d_d98yMgzJv2gdNwDkarDQ6bYd6xrEuIct9nWDwj__TX3h3gZZgHx0J5AI_vDet6wb8XnYlKZTNIUH4H7p8kEKW8THanPHI8co7F1JfQAMG1d9efiFDyzi0j7kwVrVgVAC4W1nMEvn_fSJGRz8RzFan76JYxF4/s1600/degradacion%20emocional.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhogLBzl1mpS7ohCSZAP73SJA4iGDfQ2d_d98yMgzJv2gdNwDkarDQ6bYd6xrEuIct9nWDwj__TX3h3gZZgHx0J5AI_vDet6wb8XnYlKZTNIUH4H7p8kEKW8THanPHI8co7F1JfQAMG1d9efiFDyzi0j7kwVrVgVAC4W1nMEvn_fSJGRz8RzFan76JYxF4/s1600/degradacion%20emocional.jpg"/></a></div>
<b>Hemos pasado de ser hombres libres a ser seres humanos intervenidos por máquinas
</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me encuentro en el aeropuerto Adolfo Suárez, Madrid-Barajas. Acudo a él en esta tarde de sábado con la intención de salir de la creciente indiferencia, estrés y crispación que amenazan nuestra convivencia diaria. Pero sobre todo con el deseo de reencontrarme con la humanidad que antes reinaba en las grandes ciudades.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ante esta imperiosa necesidad de identificación y de reencuentro con mi especie, he decidido visitar el recién remodelado Aeropuerto. Mi objetivo principal, y a la vez sociológico, es dar fe de la manifestación de emociones humanas, lejos de la gran ciudad.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
He de advertir que hace décadas que no visitaba el aeropuerto. Después de las cerca de cuatro horas que he deambulado por distintas terminales (T1 Y T4), he podido constatar y confirmar con el personal de llegadas, que las muestras de afecto, aunque afortunadamente siguen existiendo, han disminuido considerablemente en los últimos años.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El aeropuerto ha tomado la forma de una ciudad provista de comercios que alivian y hacen más llevaderas las estancias de los viajeros. Para integrarme en esta nueva ciudad encapsulada he consultado con el personal, como el resto de viajeros, los horarios de regreso del tren que me llevará de regreso a la estación más cercana, he visitado los aseos y he intercambiado impresiones con trabajadores que reciben directamente a los viajeros que salen o toman su vuelo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Es cierto que no es lo mismo llegar que salir o esperar un transbordo aéreo. En las salidas tienen lugar las despedidas, que suelen diferenciarse de las llegadas porque son más traumáticas. Conviene también diferenciar las salidas de ocio, más breves y de carácter nacional por lo general, que las salidas intercontinentales que además de ser más cansadas por su duración suelen ser más espaciadas en el tiempo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Mientras que la T4 se caracteriza por ser la terminal “amable”, según me informa un empleado, por llevar a cabo los vuelos más llevaderos como son los de ocio o nacionales, la T1 es la que soporta mayor carga emocional entre sus viajeros, ya que sus vuelos son más traumáticos debido a sus estancias mucho más prolongadas. Pero al contrario de lo que se puede llegar a pensar, no todas las llegadas al aeropuerto son alegres o “amables”. No lo son porque en estos vuelos también vienen personas que se ven obligadas a dejar su patria y a su familia. Lo hacen buscando mejores condiciones de vida. Y dejar a tus seres queridos supone un luto en vida.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Existen pocos lugares como los aeropuertos, en los cuales pueden confluir tantas emociones. El aeropuerto es la única ciudad abierta al mundo que no apaga sus luces de día ni de noche. Son inmensas infraestructuras diseñadas más para unir más que para separar. Unen almas aunque separen cuerpos, independientemente de cuál sea el sexo, la nacionalidad o la ideología.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La mayoría de personas que salen o entran en un aeropuerto, viajan acompañadas. Porque incluso las personas que viajan solas llevan en su mente y en su corazón la imagen de sus seres queridos. Las emociones son el auténtico aire que se respira en los aeropuertos y el verdadero combustible que mueve los aviones.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me dirijo al área de salidas de la T1 por recomendación del personal, con objeto de ver escenas emotivas. La única escena que logro ver es la despedida de dos amantes que se despiden con dos besos apasionados, pero que no esperan como antes a que cualquiera de los dos desaparezca al final de los pasillos entre la multitud. Una vez traído de vuelta en uno de los autobuses que conectan las distintas terminales (T1, T2, T3 y T4), tomo asiento en el área de llegadas de la sala 10 de la T4.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Al cabo de media hora, recién entrada la noche, empiezo a ver la primera escena emotiva: la de una joven pasajera que nada más salir por la puerta se arrodilla para abrazar a un par de gemelas pequeñas que salen a su encuentro. Pero la vista no es la única testigo de estas escenas. Minutos después se puede escuchar algún grito de alegría al percibir, después de un tiempo, que el ser querido y esperado estaba al lado de la persona que iba a recogerle.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
En otro de los momentos, una joven enamorada despliega una cartulina azul para recibir a su príncipe azul en la cual se puede leer: “Bienvenido a casa” y justo al lado de dicho texto, se puede ver dibujado un avión que sale de Las Palmas. Otros aprovechan para hacerse selfies espontáneos con flores y globos con los recién llegados que inmortalizan a su llegada.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Más apartadas de las puertas se pueden ver a personas que sujetan tablets o móviles con sus nombres para que los recién llegados puedan identificarlos. O mascotas que como miembros de la familia reciben ladrando de una forma tan desmesurada y descontrolada como alegre, a sus seres queridos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tras una breve conversación mantenida con algún empleado de la terminal de salidas de la T4, sobre los motivos por los cuales ha disminuido esta preocupante falta de expresividad emocional llegamos a varias conclusiones. El mundo ha sufrido en el último lustro guerras, volcanes y pandemias que nos han vuelto más antisociales. A eso habría que añadir que en la última década se han producido importantes cambios tecnológicos que han modificado y enfriado nuestra forma de ser y de relacionarnos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La tecnología, en definitiva, a través de las redes sociales, los smartphones y demás aplicaciones, ha suplantado la relación real por el contacto virtual, provocando en nuestra sociedad una degradación emocional. Es más, ha terminado por absorber gran parte del tiempo y energía que antes podíamos dedicar a relacionarnos no solo con los demás, sino con nosotros mismos. En otras palabras: han terminado por hacérnosla adictiva después de haberla logrado instalar en nuestros discos duros, tanto mentales, como emocionales, hackeando de esta forma nuestras vidas, nuestra forma de sentir y de pensar. Hemos pasado de ser hombres libres a ser seres humanos intervenidos por máquinas. Y esa frialdad ha terminado por apoderarse de nuestras emociones socavando la cantidad y la calidad de nuestras relaciones personales y sociales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Es hora de volver y de aterrizar. Hace apenas una hora que conseguí desplegar mis alas y alzar el vuelo desde el interior de este aeropuerto. Mi llegada ha sido mucho más enriquecedora que mi salida, al haber podido culminar el viaje con las respuestas esperadas y las expectativas cumplidas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 3 de diciembre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-54482391894431786722023-11-23T23:12:00.019+01:002023-11-24T01:35:57.631+01:00El consultorio<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjC0TIcA2KYqnr08mC9kxeUdu2CeYMWXJ4slT8Aha7LghNSZdjTo5KKPRrzYBagjCbRQzO3rtQbwYfc0j222DVdzfqrJ5MhWwmugCzpAxEO62APDhqsp0aufcrk8KPngjTaEh7wv8hhGFDQeBNr_-eiPTPh7z6L-5p-sSXopB2X41ySw-nEMjDPaMzhp4U/s1600/El%20consultorio1.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjC0TIcA2KYqnr08mC9kxeUdu2CeYMWXJ4slT8Aha7LghNSZdjTo5KKPRrzYBagjCbRQzO3rtQbwYfc0j222DVdzfqrJ5MhWwmugCzpAxEO62APDhqsp0aufcrk8KPngjTaEh7wv8hhGFDQeBNr_-eiPTPh7z6L-5p-sSXopB2X41ySw-nEMjDPaMzhp4U/s1600/El%20consultorio1.jpg"/></a></div>
<b> Y ese es un motivo más que suficiente que me anima a seguir curando pacientes femeninas</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Parece mentira, por no decir triste, como algunos imprevistos, pueden cambiar el transcurso del día. El caso es que esta mañana al salir de la ducha y ponerme la camiseta he descubierto, gracias al espejo, unas manchas rojas, en dicha prenda. Parecía, ahora viéndolo con cierta perspectiva, un hincha del Sporting (como es sabido, la camiseta de dicho equipo asturiano, está formada por franjas alternas y verticales, de colores rojo y blanco). Y digo del Sporting y no del Atlético, porque sin ser seguidor de ningún equipo, siento una especial predilección por los equipos humildes.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los equipos humildes suelen proporcionar muchas más emociones que los primeros de la lista y casi siempre pierden porque tienen menos recursos económicos para fichar mejores jugadores. Se puede afirmar, por tanto, que el fútbol no es un deporte igualitario, ni justo. No solo porque juegan menos mujeres, sino porque no juegan los equipos en las mismas condiciones y con el mismo presupuesto, como lo hacen por ejemplo, dos jugadores de ajedrez.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero volvamos al lugar de los hechos. Al darme cuenta que eran manchas de sangre, he indagado por distintas partes de mi cuerpo, con objeto de averiguar su origen (bueno a excepción de una, por miedo a que se cumpliesen mis temores). No lo he logrado averiguar hasta pasada una media hora. La sangre provenía de uno de mis dedos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Una vez localizada la herida, he procedido a ponerme una tirita. El problema es que no pegaba lo suficiente y se abría. Así que, ante el permanente goteo o hemorragia, se me ocurrió la brillante idea de coger un poco de papel higiénico y sujetarlo fuerte con cinta celo. Dicho y hecho. La solución ha sido fantástica y ha surtido su efecto de torniquete.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Primera parte del imprevisto solucionada. Pero una vez quitada la camiseta se me ha presentado el segundo desafío: ¿cómo quitar las manchas de sangre? Así que he empapado las zonas afectadas con un quitamanchas y a continuación he procedido a hacer un lavado a mano. Tonto de mí, porque podría haber consultado a alguna vecina, hubiera recibido sus respectivas atenciones y cuidados y en el peor de los casos, al menos, hubiera conseguido por añadidura, limpiar la morbosidad mi mente.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lamentablemente, una hora después, tenía cita en la piscina y he tenido que quitarme mi precioso e inimitable vendaje con toda la pena del mundo. Y para colmo no estaba la socorrista con la que suelo hablar. Otra oportunidad perdida ante la cual hacer gala de mis curas y habilidades.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Así que al final he terminado consolándome retrotrayéndome a mi niñez. Aquella época en la que solía jugar inocentemente con una vecinita. Yo solía entretenerme con su cocina (como se ve ya afloró por entonces, una de mis aficiones), mientras ella se empeñaba en jugar conmigo a los médicos. Para ello, solía instalar la clínica detrás del sofá. Hasta que, claro, un día nos pillaron.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Como consecuencia de ello, la "autoridad competente", decidió precintar el consultorio. Pero gracias a Dios, como ha quedado patente hoy, mi vocación de sanitario no se ha visto afectada por tan lamentable decisión. Y ese es un motivo que además de alegrarme, me anima, a seguir curando pacientes femeninas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 23 de noviembre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-18846998280878808702023-11-12T07:35:00.009+01:002023-11-12T14:49:11.354+01:00Estimada soltería<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeW57_VmPHKULeNTi1eBsKwP22HLBPH2HSYFtaEkNoGwYaXqQbAmWavog_xvT0jGBs3cKMMzmtQP53CFlI0cU_a8E0ALGdHXXSBkz4WP3uyambpgrYXcc39K141BJryEK3vziuRByMr6GThUGZmZVLAKZ41PWElUzQMXnTZfRJpwF5Z5DA5m3ywK1OMhQ/s1600/Estimada%20solter%C3%ADa.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="853" data-original-width="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeW57_VmPHKULeNTi1eBsKwP22HLBPH2HSYFtaEkNoGwYaXqQbAmWavog_xvT0jGBs3cKMMzmtQP53CFlI0cU_a8E0ALGdHXXSBkz4WP3uyambpgrYXcc39K141BJryEK3vziuRByMr6GThUGZmZVLAKZ41PWElUzQMXnTZfRJpwF5Z5DA5m3ywK1OMhQ/s1600/Estimada%20solter%C3%ADa.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Estimada soltería</b>:
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Te escribo, lo sé, mal y tarde. Mal, porque en lugar de una forma imprevista, lo hago de un modo inducido, en un día como hoy, Día Internacional de los Solteros. Y tarde, porque ni siquiera he tenido el detalle de celebrar contigo durante estos años, nuestro 50º aniversario.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Cómo no iba por tanto a dirigirme a ti, después de más de seis décadas juntos, a través de este género epistolar e íntimo, muestra del afecto y la confianza que ambos nos profesamos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lo hago para darte las gracias por haber estado cada mañana, cada tarde y cada noche no solo a mi lado, sino dentro de mí. Por hacerlo de una forma tan incondicional, sea cual fuese mi estado personal. Por haberme permitido conocer nuevas personas y nuevos mundos. Por aportarme objetividad. Por haberme permitido y enseñado a ser fiel a mí mismo. Una persona que deja de ser fiel a sí mismo, es imposible que pueda serle fiel a otra. Solo así puede entenderse el apabullante número de parejas que se separan.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Como bien sabes, he tenido a lo largo de mi vida compañías igual de fieles que la tuya, pero lamentablemente no han llegado a ser tan duraderas en el tiempo como lo está siendo esta relación contigo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Creo que nadie me conoce mejor que tú. Tal vez por eso nunca has dudado de mi fidelidad y me has permitido intimar con la soledad, que conociera gracias a ella la inspiración de mi musa, que pudiese comunicarme con ella, gracias a una de sus plumas, o que pudiera encontrar la ansiada paz en mi alma.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Desde siempre supiste que no me iría de ti. Ni el mismísimo Cupido sucumbió ante tu embrujo. Por eso en algún momento llegué a preguntarme quién estaba detrás de ti. Hasta que la respuesta vino en forma de poemas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si a estas alturas seguimos juntos, es porque tú has sabido reconocer mis cualidades y yo he encontrado en ti la estabilidad y la fidelidad inquebrantable que hasta hoy nadie ha sabido darme con la inmensa generosidad con la que tu lo haces.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hoy gracias a Dios, estás mucho mejor considerada que antes, como así lo demuestran las últimas estadísticas. Ya en 2021, tu tendencia se vio al alza. Según el INE, en España había 14.115.300 solteros, un máximo histórico. Más de la mitad (7.578.800), eran hombres y 6.536.500 mujeres. Cifras que según el concepto de soltero, como veremos más adelante, conviene coger entre pinzas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y digo coger entre pinzas, porque da pena darse cuenta de cómo la sociedad aun no ha interiorizado tu verdadero significado. Y es que un <a href="https://tinyurl.com/3ch4txnp">soltero</a> no es aquella persona que no está casado, ni está suelto o libre, como viene a definir la RAE.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
A un divorciado, por ejemplo, no se le puede considerar un soltero porque no esté casado. Por mucho que ande suelto o libre, como especifica la Institución. En otras palabras, la soltería es un estado civil que es imposible recuperar una vez que se pierde. ¿Acaso deja de ser virgen una persona que se ha separado? De la misma forma la libertad que uno ha perdido al convivir con alguien es imposible que nadie pueda recuperarla nada más separarse.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Algunos ignoran, y tu eres testigo de ello, que los solteros también tenemos nuestras separaciones y nuestros divorcios. Supongo que recordarás aquellos años en los cuales me distancié emocionalmente de ti, mientras tu intentabas retenerme físicamente cerca de ti. Afortunadamente, aquello no acabó en divorcio, es decir, en una boda.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y los dos hemos aprendido durante estos largos años, que la soltería también requiere de un compromiso, de una actitud responsable ante la vida, como es la de no traer más sufrimiento a la vida o el hecho de no crear más infelicidad a los demás. Compromisos que son mucho más difíciles y duros de mantener que el de un casado. Porque un soltero tiene que ser fiel a más amantes, como son la soledad, la paz o la libertad. Y de esta forma se da la paradoja que el soltero termina convirtiéndose en un amante platónico-poliamoroso.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tu compañía ha sido y es tan enriquecedora, que nunca he tenido la sensación de estar solo. Siempre he estado contigo y gracias a ti he podido acompañarme a mí mismo. Y la relación más profunda que una persona puede tener es la que puede llegar a tener consigo mismo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Como soltero y compañero tuyo no me arrepiento de este estado de gracia que desde el primer latido de mi vida comparto segundo a latido contigo. Al fin y al cabo un casado, en la mayoría de los casos, termina por convertirse en un ex soltero incomprendido por su pareja y en un divorciado distanciado de sí mismo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hoy es el Día de los solteros sin compromiso, porque los que están comprometidos ya están medio casados. Y yo, lejos de hacer gala de mis prebendas pacifistas, solitarias o libertarias, prefiero, en un día como el nuestro, recordar el compromiso que desde aquel primer latido nos sigue manteniendo unidos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 11 de noviembre del 2023. Fuente de la imagen: wikipedia.com</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-35889602565899837842023-11-01T14:32:00.008+01:002023-11-01T16:59:21.862+01:00A mis difuntos<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgzOcv2zfpaErMHpPh5Oj1UWxNR9gaEeIrAcUkHMdyneWTiw5cQpleAdVl97QJXyCa01tE2tBA2xXMIJ5wFf_Bi7yEyuaVkWVIXlCmWafPbOrJVgaO0qcw8Rh9Hl3J58nsm293bC5SP-fs4Zwhv4SfiMJyNRow4YeZLY4-vPs5pnopWATf4Q-BJCuSuBMM/s1600/A%20mis%20difuntos.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="633" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgzOcv2zfpaErMHpPh5Oj1UWxNR9gaEeIrAcUkHMdyneWTiw5cQpleAdVl97QJXyCa01tE2tBA2xXMIJ5wFf_Bi7yEyuaVkWVIXlCmWafPbOrJVgaO0qcw8Rh9Hl3J58nsm293bC5SP-fs4Zwhv4SfiMJyNRow4YeZLY4-vPs5pnopWATf4Q-BJCuSuBMM/s1600/A%20mis%20difuntos.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Queridos familiares y amigos:</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Celebrar el día de los difuntos con un cielo tan gris como el de hoy, es algo que me parece injusto y a la vez contradictorio. Injusto, por la luz que con vuestras miradas compartisteis durante largos años conmigo. Contradictorio, por la energía gracias a la cual enriquecisteis mi vida y mi existencia. Existencia a través de la cual hoy intento brillar, como una luciérnaga y no de una forma constante y eterna como la vuestra.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sería injusto y contradictorio por la luz que aún sigo recibiendo de vosotros, la mayoría de las veces sin ser consciente de ello, y declararos difuntos, cuando todos esos momentos que pasamos juntos siguen tan vivos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sería de igual forma, injusto e improcedente. Injusto que hoy pudiera sentirme triste y que os correspondiese con esa energía lastimera. E improcedente y un desprecio que podría llegar a doleros e incluso a haceros daño.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sería una afrenta añadida hacia todas aquellas sonrisas tan luminosas, hacía aquellos latidos tan efusivos y acompasados, y, en definitiva, hacia aquellos lazos interiores que fuimos anudando con esmero y cariño, durante el transcurso de nuestras vidas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El amor que habéis sembrado en mi, a diferencia del amor efímero y terrenal, es una semilla que cada día va creciendo más dentro de mí, gracias a vuestra luz y al riego diario de mi recuerdo. Tanto, que a veces me pregunto, cómo es posible que os sienta y quiera más que a muchos vivos que forman parte de mi vida diaria.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y mientras pienso en la respuesta, no puedo dejar de emocionarme. Porque gracias a vosotros puedo volver a dejarme de sentir solo, y a ser capaz de creer en el Amor, con mayúsculas. En ese amor que por ser tan puro no requiere de instintos. Esta es la magia de los recuerdos desprovistos de nostalgia: con un solo recuerdo vuestro, soy capaz de volver a amar, y de volver a hablaros, como cada noche hago. Gracias por vuestra inmensa capacidad de transformación.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sería, de igual forma injusto, pronunciar la palabra “muerte”, de manera especial, en un día como este. Los verdaderos muertos son aquellos que son incapaces de “revivir” con una emoción especial y sin tristezas, los momentos que compartieron con todos los suyos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Celebrar en un día como este, desde las emociones de mi corazón, sin tener en cuenta las vuestras, constituiría un innegable acto de egoísmo y una inmensa falta de sensibilidad y de empatía. Os agradezco por tanto la oportunidad que me brindáis al poder reflexionar sobre la temporalidad y el aprovechamiento de la vida. La de cómo me gustaría que me recordasen y/o homenajeasen en un día como este. Qué mejor que hacerlo con un poema o un texto del autor que sea del agrado de los lectores.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No puedo olvidarme en un día como hoy, de mis familiares caninos, de todos vosotros, mis queridos Tarzán, Chiqui, Boby, Tocho o de Kutxi, que tanta alegría, amor, felicidad y consuelo me habéis dado durante largos años. Gracias por enseñarme que el amor verdadero es un sentimiento que trasciende la especie humana.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Gracias a todos por la energía que me disteis y que no fui capaz de devolveros. Gracias por seguir estando aquí, dentro de mí. Gracias por hacerme renacer cada vez que os recuerdo. No importa que no pueda veros, lo importante es saber que estáis aquí, siempre accesibles y que puedo seguir sintiéndoos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me despido, si no feliz, al menos con el consuelo de saber que al menos, cuento con esa legión de familiares y amigos. Mucho más numerosa, y en algunos casos más querida, de las que dispongo en la tierra. No os debe, ni puede extrañar por tanto, si os digo que no me hace falta tomar unos dulces, tan típicos en esta vuestra fiesta, para evocaros. Prefiero seguir muriéndome de amor cada vez que revivo vuestro recuerdo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Besos, abrazos, pero sobretodo, mucho cariño</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¡Hasta pronto!
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>José luis</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 1 de noviembre del 2022. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-593568986784519582023-10-28T22:42:00.007+02:002023-10-30T22:24:15.529+01:00Doble moral<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3W-codsymNo62oxr69hqxKxLcm_HVSWm6t4VJyS1wwMVPzrHBKOqWW1h-cMwffCP9XONB8PwbWJ6OVCxmgsnIPUcbadJP2KEYY347Nek1olZ97cUb-6wyXKTTHXWgAfJR6CfH-lmWkqBLf88BVEKe-O5pGFg8rYNgt5mwrPNzU4tKZm_tO15haxT_fAU/s2560/Doble%20moral.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" width="600" data-original-height="1707" data-original-width="2560" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3W-codsymNo62oxr69hqxKxLcm_HVSWm6t4VJyS1wwMVPzrHBKOqWW1h-cMwffCP9XONB8PwbWJ6OVCxmgsnIPUcbadJP2KEYY347Nek1olZ97cUb-6wyXKTTHXWgAfJR6CfH-lmWkqBLf88BVEKe-O5pGFg8rYNgt5mwrPNzU4tKZm_tO15haxT_fAU/s600/Doble%20moral.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
L<b>os países occidentales son muy activos a la hora de denunciar crímenes contra la humanidad, pero muy pasivos a la hora de remediarlos</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Existe en los conflictos bélicos, la costumbre de prostituir el lenguaje. De esta forma pasa a convertirse en un arma para justificar los intereses y las atrocidades de cada uno de los bandos. Es conveniente, por tanto, antes de analizar la situación, clarificar de una forma objetiva, cada uno de estos conceptos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Israel, declaró el estado de guerra pero no indicó contra quien. Luego se ha sabido por sus actuaciones que no era una declaración de guerra contra Hamás, sino contra toda la población de Gaza, incluidos según hemos visto, los rehenes tanto patriotas como extranjeros que se encontraban en ese momento en dicho país.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La actuación de Israel, a la vista de los hechos, no se puede considerar una guerra entre dos Estados, sino una masacre contra un pueblo. La diferencia entre una guerra y una masacre o un genocidio, es que en las guerras existe un enemigo armado e identificado. En un genocidio o en una masacre el enemigo está constituido por grupos sociales indefensos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero la guerra no ha sido el único concepto manipulado al antojo de uno de los bandos. La palabra “muerte” se sigue utilizando en función de quién es la víctima. Así, mientras que los gazatíes mueren, los israelitas son asesinados. Una apreciación que ha denunciado valientemente la reina <a href="https://tinyurl.com/4umvenvv">Rania</a> de Jordania.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tampoco las zonas humanitarias establecidas por Israel, al sur de Gaza, son zonas de protección, sino áreas de exterminio, ya que la población engañada, una vez que llega, es bombardeada por las fuerzas de Netanjahu, el beneplácito de Biden y la complicidad lenta, silente y postergadora de Europa.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El derecho legítimo de defensa de Israel, ante la atroz y condenable invasión del grupo terrorista de Hamás, ha excedido con creces la proporcionalidad y los convenios internacionales humanitarios, lo cual supone una agresión al derecho internacional de todos los países que firmaron dichos tratados.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Europa, después de respaldar (ojo, sin condenar) los bombardeos autorizados por Estados Unidos, ha pasado a proponer “pausas humanitarias” que permitan establecer corredores para facilitar la llegada de ayuda, pero sin cuestionar siquiera la invasión terrestre de Israel. Como si la respuesta que ya ha ejercido este país con sus 8000 víctimas, después de veinte días de intensos bombardeos, no hubiera sido lo suficientemente desmedida y pavorosa a los ojos del mundo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La doble moral de occidente queda más que patente, ya que mientras Israel bombardea con el apoyo de Estados Unidos, Europa debate sobre cuántas pausas son necesarias o si es más conveniente un alto el fuego. Todo sin descartar una conferencia de paz dentro de (atención), seis meses, cuando al paso que vamos ya no exista ningún palestino (los países occidentales son muy activos a la hora de denunciar crímenes contra la humanidad, pero muy pasivos a la hora de remediarlos). Claman, en este sentido, al cielo las palabras de Europa dirigidas a Israel y a Netanjahu, y no a la administración norteamericana de Biden, que es la única que puede poner fin al conflicto o extenderlo aún más.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El estrepitoso fracaso de la política exterior norteamericana es más que evidente, por la facilidad que tiene de entrar en conflictos y la dificultad diplomática que tiene de finalizarlos, sin haber cumplido su objetivo inicial. La invasión rusa en Ucrania iba, según Biden, a durar un mes con el bloqueo económico. Casi dos años después Putin, ante los escasos avances por parte de Europa y de Rusia, ha abierto un nuevo frente en Israel gracias a la influencia de Irán y sus aliados de Hamás. Ahora solo falta que China lance una operación en Taiwan.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La nueva dinámica de Putin en la guerra de Ucrania supone una peligrosísima escalada con la que ni la inteligencia norteamericana ni la isralí contaban. Basta ver los recientes lanzamientos de misiles intercontinentales que Rusia ha lanzado sin cabezas nucleares, capaces de alcanzar los 12.000 kilómetros de distancia.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Putin, a diferencia de antes del conflicto palestino-israelí, es un hombre más sonriente y relajado que incluso es capaz de realizar viajes oficiales fuera de su país. A Biden, por el contrario, el conflicto puede costarle su reelección, mientras que para Netanjahu, la guerra es una excusa para librarse de sus causas judiciales a las cuales habría que añadir tres errores adicionales. El primero el no haber previsto la invasión de los terroristas de Hamás. El segundo, bombardear a la población en lugar de a los terroristas, Y el tercero por la invasión terrestre, de consecuencias impredecibles, que piensa llevar a cabo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lo verdaderamente lamentable es que Israel, después de décadas de conflicto no sea consciente que con esta actitud no hace más que reforzar la causa de los terroristas de Hamás. Que con la utilización única de la fuerza de las armas, no podrá resolver un problema histórico y político. Que solo es posible alcanzar la paz por medio del diálogo. Para ello España, como país que preside el Consejo de la Unión Europea, puede contribuir con su ejemplo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 28 de octubre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-31354016649544443622023-10-22T22:55:00.006+02:002023-10-22T23:38:10.379+02:00Duele<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhtbFJGdv3apwpsOros3fZp5qZ2_fU83cSVDnV_pb1y3AnVeNLD1q1vHWZQmb60OmQBymnW94jVw9l7s1IUeJ2waVPTUsofLnnMu8j39wk39JiADkcY3BYD0OQbW_i4Dn8qW5b9jBslqMX9lFGEoLrgusYolGHEhGQkLfbE-qLu4rbpxwXG_LfGl_twfjQ/s1600/Duele.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhtbFJGdv3apwpsOros3fZp5qZ2_fU83cSVDnV_pb1y3AnVeNLD1q1vHWZQmb60OmQBymnW94jVw9l7s1IUeJ2waVPTUsofLnnMu8j39wk39JiADkcY3BYD0OQbW_i4Dn8qW5b9jBslqMX9lFGEoLrgusYolGHEhGQkLfbE-qLu4rbpxwXG_LfGl_twfjQ/s1600/Duele.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver y escuchar como algunos condenan el terrorismo de Hamás y no el genocidio de Israel.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> darse cuenta de cómo los prejuicios religiosos, occidentales y geopolíticos, se anteponen, no ya ante los derechos, sino ante los sentimientos humanos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como el dolor y la sangre derramada en un conflicto de semejantes dimensiones se utiliza de forma partidista en algunas cámaras parlamentarias, para arrojársela a otros, en lugar de hablar de los problemas que atañen a los ciudadanos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como en escasos días un país que parecía civilizado pierde, por culpa de su líder, todos los valores que hasta la fecha se le atribuían a dicha sociedad.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como a diferencia de otros países, los crímenes que cometen los países apoyados por occidente quedan impunes.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como la especie humana pierde el norte. De cómo la tecnología y la ideología es capaz de hackear nuestras vidas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> la hipocresía de condenar el hambre desde un país que apoya a otro que bloquea no solo los alimentos, sino el agua y la electricidad de la población.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> el dolor de las 4.137 vidas inocentes que se han perdido hasta la fecha y los 13.162 heridos inocentes que están padeciendo esta injusta guerra.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> el dolor ajeno cuando existe algo de humanidad.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> el hombre que es capaz de discriminar el dolor de un semejante de otro, para convertirse en un ser inhumano.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver y escuchar como a algunos les duele más un disparo que un bombardeo continuado, y una invasión que un genocidio.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como algunos se sitúan al lado de un bando cuando todos pertenecemos al mismo bando de la especie humana.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver en un escenario de guerra mundial, como algunos, en lugar de buscar concordia, aprovechan para recoger munición y la traen a su país para crear más conflicto y enfrentamiento entre los españoles.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> la falta de sentido de estado de una oposición que no hace proposición.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como el pueblo palestino sometido a la voluntad de los terroristas de Hamás y a la barbarie de Israel sea aún, después de intensos días de bombardeos, y de más de una década de sufrimiento, es el más incomprendido.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> la facilidad y rapidez con la que el ser humano pasa de la palabra amor a la palabra guerra.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como algunos exigen y esperan la condena de uno de los dos bandos, antes de exigir la paz y de hacerlo a título personal.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> volver a darse cuenta que la especie humana es la más violenta y destructiva de todas las especies.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver el daño y el sufrimiento que es capaz de provocar el ser humano sobre seres inocentes de su misma especie.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como el amor y el odio siguen siendo fuerzas incontrolables que se escapan al control y a la razón humana.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como el instinto territorial termina por imponerse al sentido común y a los lazos de hermandad entre los pueblos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ser consciente de la barbarie que es capaz de generar la venganza creada por el odio.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como un arma es capaz de acabar en un instante con cientos de vidas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como el bando civilizado exige la evacuación de hospitales mientras bombardea los lugares a los que se dirige la población que huye bajo las directrices occidentales de Israel.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> la injusta equidistancia occidental e internacional entre los terroristas y los genocidas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como se ofrecen armas antes que palabras para la resolución del conflicto.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como se incumplen los tratados humanitarios internacionales mientras se califica de “animales no humanos” a la población masacrada y bombardeada.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Duele</b> ver como la vida de 200 rehenes adquiere más valor que la de los 4.137 muertos y 13.162 heridos palestinos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 21 de octubre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-91036410214515995532023-10-14T01:46:00.017+02:002023-10-15T16:33:01.430+02:00El ciego<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgqbu2-iUCZJP8XmUw6oD_DsBQnkKA2N42Hw_X65w3znQIQ-EFOpRjJsw40QXDcrjrAJXpHBlds-2R7qP3_-eNPl1hz91lScVfoZ-Z26evxmLWHkIsqlUk7NHAe1iHDpnI47exluP_2235ARpxhOWDbpAIcl5D9H6d1fWeVlPrygto3pD0bxlawK9hN47I/s1600/bandera%20palestina.PNG" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="378" data-original-width="790" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgqbu2-iUCZJP8XmUw6oD_DsBQnkKA2N42Hw_X65w3znQIQ-EFOpRjJsw40QXDcrjrAJXpHBlds-2R7qP3_-eNPl1hz91lScVfoZ-Z26evxmLWHkIsqlUk7NHAe1iHDpnI47exluP_2235ARpxhOWDbpAIcl5D9H6d1fWeVlPrygto3pD0bxlawK9hN47I/s1600/bandera%20palestina.PNG"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Existen dos tipos de ciegos: el que no puede ver y el que no quiere mirar </b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La imaginación no solo sirve para soñar, también es útil para solucionar problemas y conflictos. El odio es una energía mal canalizada que agrava los ya existentes. Mucho más si es desproporcionado. La inmensa mayoría de las personas que han aportado algo a la humanidad las han soñado antes. No se puede soñar si uno odia. El odio antes de destruir al adversario empieza por aniquilar al que lo siente.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Existen dos tipos de ciegos: el que no puede ver y el que no quiere mirar. Netanyahu además de estar cegado por el odio se niega a ver la realidad, y es incapaz de distinguir a los terroristas de Hamás de la población civil palestina. También es incapaz, según su estado visual y su obnubilación mental e iracunda, de aportar soluciones por la vía pacífica y diplomática.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Me pregunto si los palestinos, en vez de los terroristas de Hamás, son los culpables de que el gobierno Israelí de Benjamín Netanyahu y sus servicios de inteligencia no hayan detectado, ni al parecer previsto, semejante acto terrorista, para que les estén bombardeando diaria, injusta e indiscriminadamente. Como tampoco es capaz de predecir las consecuencias humanitarias e internacionales que tendría una acción terrestre sobre Palestina y de las cuales serían junto con su aliado norteamericano, los primeros responsables.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero al Estado de Israel, no le ha bastado con bombardear a inocentes. Ha decidido ir mucho más lejos y ha calificado a los palestinos a través de su Ministro de defensa, Yoav Gallant, de “animales humanos”. Ellos, los israelitas que están ante el escenario de una más que previsible invasión, a punto de equivocarse de nuevo, y que ya han superado con sus actos criminales a los terroristas de Hamás.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los genocidas que han lanzado seis mil bombas en seis días, no han tenido ningún reparo a la hora de llamar a los palestinos (que no a los miembros de Hamás), "animales humanos...". Y por lo que se ve tampoco tienen ninguna intención de disculparse y/o de rectificar sus palabras (han estado tanto tiempo apretando gatillos, que se les ha pasado).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los mismos que han dado un escaso ultimátum de veinticuatro horas a más de un millón de personas para que dejen sus casas y a sus familiares heridos y se desplacen al sur. Los que niegan las necesidades más básicas como el suministro de comida, agua o luz o medicamentos a los palestinos heridos, sin haber hecho nada. No hace falta pensar mucho para llegar a la conclusión que un jefe de Estado que trata por igual a un terrorista que a un civil, no merece ser digno del puesto que ocupa.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y un enviado norteamericano, como Blinken, que según sus palabras: "Entiende a nivel personal lo que implican las masacres perpetradas por Hamás para los judíos israelíes y para los judíos en todas partes", que no es capaz de empatizar con el sufrimiento aún mayor que está perpetrando Israel sobre los palestinos y que en lugar de ejercer funciones diplomáticas y pacificadoras, respalda y no condena la respuesta desproporcionada de Israel, deja mucho que desear.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
"Nosotros, las democracias, nos distinguimos de los terroristas por tener estándares diferentes, incluso cuando es difícil, y de rendir nosotros mismos cuentas". "Por eso, es muy importante tomar todas las precauciones posibles para evitar dañar a civiles, y por eso lamentamos la pérdida de cada vida inocente. Civiles de todos los credos, de todas las nacionalidades han muerto", ha sentenciado el precavido y compungido demócrata norteamericano, después de seis días de intensos bombardeos sobre la población civil (la diplomacia tiene sus tiempos).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Netanyahu, ya tiene las bendiciones, el respaldo y la inmunidad de los Estados Unidos. Esto quiere decir lisa y llanamente que tiene vía libre para seguir cometiendo actos cruentos. Con la ventaja añadida de que al restar respaldado por dicho país, no podrá ser acusado de crímenes contra la humanidad, como lo ha sido Rusia.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La confusión es tal, que algunos miembros de la clase política española, han intentado sacar rédito apoyando a la parte occidental "representada" por Israel mientras acusaban a la izquierda de estar al lado de Hamás, en lugar de los palestinos, que son los que están pagando las consecuencias. Como si la vida y la muerte de unos humanos valiesen unas más que otras. Es oler a sangre y ahí están como tiburones para morder un poco de carnaza. A unos les ciega el odio y a otros les confunde el color de la sangre en el agua.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La imaginación, a la que hacía alusión al inicio, le lleva a cualquiera a hacerse una pregunta: si los palestinos son "animales humanos", ¿qué tipo de seres son los israelitas de Netanyahu? Según un dicho español, el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Lo malo es que el representante (líder es un adjetivo que le queda grande), ya ha superado los dos tropezones, ya que en su impulsividad iracunda y mortífera, es más partidario de utilizar el comodín del cincuenta por ciento, en el juego bélico de su metaverso particular.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Calificar a un mal representante como el israelita, con el adjetivo de animal, sería por tanto, adjudicarle un piropo del cual no es merecedor. La pena es que no estén permitidos pronunciarlos y mucho menos escribirlos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 13 de octubre del 2023. Fuente de la imagen: wikipedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-34013604069198269422023-10-10T23:24:00.009+02:002023-10-11T02:26:54.784+02:00Polinstinto<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdeJrue0H08qa6nkB-QxxZl2yDD1Da43qjAQWmDEV7Q7DQijGPh-vkTAIwTdEX8WSyM4EawLvqNyaZhz84PasJXRuSPy35V_gKaFmzJAeitFb9dGiGCbedyZ98CoEkWShk8aDpCz3DXAkgo7MB70iQ90VJ8NkBUNofj4P9Wmn7iD9YHkuBbLHnluD17mw/s1600/POLINSTINTO.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="537" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdeJrue0H08qa6nkB-QxxZl2yDD1Da43qjAQWmDEV7Q7DQijGPh-vkTAIwTdEX8WSyM4EawLvqNyaZhz84PasJXRuSPy35V_gKaFmzJAeitFb9dGiGCbedyZ98CoEkWShk8aDpCz3DXAkgo7MB70iQ90VJ8NkBUNofj4P9Wmn7iD9YHkuBbLHnluD17mw/s1600/POLINSTINTO.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Los hay que prefieren no implicarse ni comprometerse con la excusa del amor romántico, cuando en lo que no creen es en el amor de pareja.</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Llegará el día en el que en lugar de rosas, regalemos rosales? (los hay muy pequeños y luego se pueden plantar en los jardines públicos para deleite de todos, regalar a algún conocido que tenga jardín o casa en el pueblo, o en último recurso a algún vivero, asociación o Institución. Y además se pueden sentir y disfrutar durante todo el año, no durante unos días).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¡Qué manía y qué egoísmo más tonto! Utilizar las flores para decirnos lo que podemos expresarnos con actos durante todo el año (trabajos manuales, textos, momentos que salen de nosotros y no de un mercado que nos dice lo que es habitual regalar). Como si lo habitual estuviera en consonancia con lo lógico y emocional. ¡Qué desprecio hacia la naturaleza! Quedarnos con su parte bella y no con lo que realmente es. Lo realmente bello es ver cómo crece a tu lado un ser por el cual te interesas y al cual mimas día a día. Lo demás es postureo e hipocresía.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Qué emoción personal transmite un ramo de flores cortado para la ocasión? Falta de empatía con respecto a la vida de los demás seres y falta de originalidad, por supuesto. Amor, desde luego que no. El amor no se puede demostrar nunca con algo externo. Así que no nos engañemos, que en el mercado del amor hay mucha mentira y manipulación. Y sin embargo nadie lo evidencia. ¡Qué curioso! Ni siquiera los detractores del amor romántico, que ya es decir. "El amor romántico es posesivo", según dicen, pero regalar obsequios a los amigos, amantes e incluso familiares no lo es.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El poliamor, los cuernos y las orgías sin embargo no son nada posesivos. Ni siquiera el amor libre. Puedes salir con todos los hombres y mujeres que quieras, y follar sin limitaciones, porque follar al parecer es un acto libre, pero hacer el amor es un acto posesivo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
En el poliamor, según sus seguidores, no hay exclusividad sexual ni afectiva, por lo tanto, se pueden establecer vínculos románticos y sexo-afectivos, vínculos románticos sin sexo, o solo vínculos sexuales. Vamos, una mezcla de lo que se entiende por amor platónico, follamigos o amantes de toda la vida, pero excluyendo según el tipo de relación de que se trate, la palabra amor (los poliamores como vemos tienen la mentalidad muy abierta pero la afectividad más restringida e interesada).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Entiendo por tanto el poliamor como una relación en la cual le ponen a uno/a los cuernos en presencia de sus amantes, amigas/os o follamigas/os, con el previo consentimiento de cada una de ellas. Una nueva forma de romanticismo visto desde un punto de vista más interesado y carnal, al existir más individuos que participan en sus poliorgías individuales o colectivas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¡Qué lástima! Los poliamores que "poseen" la verdad de los polinstintos poliorgásmicos no han tenido siquiera una ocasión para creer en el romanticismo clásico, es decir, el dirigido a una sola persona. Qué malos son los demás y que buenos los que prefieren no implicarse ni comprometerse con la excusa del amor romántico, cuando en lo que no creen es en el amor de pareja.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Así que visto lo visto, me quedo con los hippies. En primer lugar porque ellos fueron los verdaderos pioneros de lo que hoy se conoce como amor libre (como vemos no escondían el término "amor"). En segundo lugar, porque además de poliamorosos eran polipacíficos. Y en tercer lugar, porque tenían una conciencia más ecológica. Es decir, amaban mucho más que los poliamores, ya que además de hacer el amor con su especie, respetaban a todas las demás criaturas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 10 de octubre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-42631916296951521132023-09-28T10:47:00.003+02:002023-09-28T10:58:53.707+02:00Personas de mundo<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAHctiTY7a3NefzGoe1S9Uc0FqdjB8lWGqk_qAlBRpeo7Icsj14DcBYjbpeoAE87QGM-00PD6vmQzbHEWoXwKqU0wj7SMZVGEDAwCMvJS7Bhn_inPfuTnsSx0FdM6prdq6BRz9QGEc75ZSD8nWOul4ZpaAHZrtzXpeDqFl-RBsrZKr4ea3fO-XxbeyoaY/s400/personas%20mundo.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" width="800" data-original-height="800" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAHctiTY7a3NefzGoe1S9Uc0FqdjB8lWGqk_qAlBRpeo7Icsj14DcBYjbpeoAE87QGM-00PD6vmQzbHEWoXwKqU0wj7SMZVGEDAwCMvJS7Bhn_inPfuTnsSx0FdM6prdq6BRz9QGEc75ZSD8nWOul4ZpaAHZrtzXpeDqFl-RBsrZKr4ea3fO-XxbeyoaY/s400/personas%20mundo.jpg"/></a></div>
<b>Existen muchos más animales, que personas de mundo</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Viajar tiene sus ventajas: ayuda a nuestro corazón, rejuvenece nuestro cerebro, impulsa las hormonas de la felicidad, nos causa bienestar y nos libera del estrés y mucho más. Además, hay evidencia científica suficiente que demuestra que viajar con regularidad mejora nuestra salud física y mental y aumenta nuestra esperanza de vida. Hasta ahí todo fenomenal.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lo curioso es que nunca se detallan sus desventajas: pierdes la facultad de hacer multitud de cosas más interesantes en esos días, nadie te librará del jeet lag, es decir, pierdes varios días más de los que disfrutas. Todo eso suponiendo que todo transcurra con normalidad y no sufras un accidente de fatales e irreparables consecuencias. En otras palabras, nunca puedes estar seguro de que volverás.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hasta el día de hoy creía que el hombre de mundo era una persona como su nombre indica que había recorrido mundo. La sorpresa ha venido cuando he consultado su definición y he encontrado apenas un par de ellas. El líneas generales, se entiende por hombre de mundo, al hombre que tiene experiencia en el trato social y está acostumbrado a tratar con personas de elevada posición. Así que por lo que se ve, estamos más ante un hombre social que de mundo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ante el escaso número de definiciones, he recogido los conceptos personales que algunas personas han aportado en sus comentarios. Por ejemplo un hombre opina que " hombre de Mundo " es aquél que ha viajado mucho por la orbe y ha adquirido amplia experiencia de sus viajes, de sus relaciones y de todo cuánto de la cultura universal le ha sido posible conocer. Otra participante comenta: “Que tiene conocimiento de lo que es batir el chocolate en la calle. Que ha batallado fuera del hogar. Tiene sus conocimientos sobre la vida”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si me preguntaran a mí diría que una persona de mundo (seamos inclusivos), es una persona que además de viajar está acostumbrada a relacionarse a cualquier nivel social. No concibo una persona de mundo que no haya pasado gran parte de su vida viajando por ese concepto que le define. De ahí que siempre que escuchaba esta expresión deducía que se trataba de un hombre o mujer de mentalidad abierta con una amplia experiencia vital.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sabemos, a excepción de los negacionistas y terraplanistas, que nuestro mundo o planeta, está formado por tres cuartas partes de agua. Sin embargo todos (mayoritariamente las personas mundanas, que no de mundo), desconocemos el lenguaje, los sonidos y las músicas de estos protagonistas acuáticos. Con oírnos a nosotros mismos ya tenemos suficiente. Lo de escucharnos lo dejamos mejor para otro momento, ¿no les parece...?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Basta escuchar las conversaciones de los delfines de este <a href="https://www.youtube.com/watch?v=GOsfvjwwe2E">vídeo</a> y compararlas en todos sus aspectos (tono, volumen, tiempo, modulación) con muchas de las conversaciones que mantenemos en el día a día las personas que no somos de mundo, para ver que especie demuestra más grado de evolución. Así que si tomamos las definiciones anteriores no es difícil llegar a la conclusión, en función de la superficie y los kilómetros que recorren algunas especies, que existen muchos más animales, que personas de mundo. Entre otras cosas, porque hay personas de mundo que no creen ni respetan el medio ambiente del mundo (valga la redundancia) en el cual viven.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Como puede verse, ni la relación social, ni los viajes, pueden considerarse factores que definen por si solos a una persona de mundo. Por ejemplo, he sido testigo de cómo gente de mundo al volver a su país, ha traído las malas costumbres que en su país de destino eran bien vistas…
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Aún así a la gente que viaja mucho se la considera (y lo que es peor, se consideran a sí mismos) gente de mundo, porque les da la impresión de que ya están muy viajados y experimentados en ese insignificante cuarto de vida terrestre que complementa a esos tres cuartos de vida acuática. A algunos de ellos es relativamente sencillo reconocerles por la cara de Willy Fog que traen después de haber dado la vuelta al mundo en ochenta días.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Así que es mejor para no desanimarles ni disminuir su elevada autoestima, no insinuarles bajo ningún concepto, la parte de mundo que aún les queda primero por descubrir y después por conocer. Entre otras cosas porque la mayor parte de ellos cuentan con una edad avanzada que les impediría culminar sus aspiraciones.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 27 de septiembre. Fuente de la imagen: associatiocetacea.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-29008514974228452432023-09-20T21:53:00.037+02:002024-02-11T20:18:34.291+01:00Lento, rápido<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCaSQVl6csDkZFlmW2a4M0xz85PC8H6AsIN7SySO-MUueRBiqFVw4GJaE0UwiPIJnThWnPazdcw9Ka9UYskER6B89d7Eo8lhlaFYZQIp7AkESIjbb91Vahr5_2iWFHjzAB_1ozrqqD2eUcR-U0Tc1vbNjyWnjz_DBysCQe3c4SWb9n1iMrzl9ettq1kFw/s1600/Lento,%20r%C3%A1pido.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="600" data-original-width="779" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCaSQVl6csDkZFlmW2a4M0xz85PC8H6AsIN7SySO-MUueRBiqFVw4GJaE0UwiPIJnThWnPazdcw9Ka9UYskER6B89d7Eo8lhlaFYZQIp7AkESIjbb91Vahr5_2iWFHjzAB_1ozrqqD2eUcR-U0Tc1vbNjyWnjz_DBysCQe3c4SWb9n1iMrzl9ettq1kFw/s1600/Lento,%20r%C3%A1pido.jpg"/></a></div>
<b>Para separarse, por el contrario, se da la inexplicable paradoja de que no es para nada necesaria tanta lentitud</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
En el amor siempre me han enseñado a ir despacio. La buena cocina, como dicen, suele hacerse a fuego lento, para no quemarse uno mismo ni quemar al ser amado. Por ello, las fuerzas de la naturaleza suelen obrar para que el ser amante en lugar de quemarse, arda y sufra lentamente, mientras el ser amado, en lugar de apaciguar la llama, disfrute viendo como su amor arde de felicidad en sus propias cenizas. El tiempo de quemarse suele venir al final de la obra. No hay por tanto prisa alguna. En el amor debe alternarse el placer y el sufrimiento. Las incineraciones en vida son voluntarias y nadie tiene el derecho de impedir los instintos suicidas del amante, no así de la persona (¡curioso!).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Priiiimeeeeroooo hay que cooooo-no-cer-se. Después ser amigos. Más tarde compañeros. Si surge, compañeros con derechos. Pasado un tiempo y la correspondiente y obligatoria auditoría, hay que formalizar la relación y pedirle a la chica (en tiempos de igualdad), si sale contigo. Pero todavía no puede afirmarse que haya noviazgo. Para que exista tienen que transcurrir un mínimo de tres meses que garanticen la consistencia inexistente entre sus miembros a la hora de presentarse en sociedad. Luego hay que ir pensando en los anillos.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Más tarde hay que presentar a la familia el futuro miembro. Al cabo del primer año se empieza a pensar en la boda. Comienzan entonces los preparativos y a pensar donde van a vivir. También cuántos hijos les gustaría tener a cada uno. Luego los nombres de los respectivos churumbeles, dependiendo si es niño o niña.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pasado un tiempo, que no suele ser inferior a un año, viene la boda, previa hincada de rodillas, después de haber entregado otras partes, como son el corazón y el alma. Después vienen las primeras discusiones, uno ya no ve al otro como antes, pero la culpa de todo suele recaer siempre en el destinatario/a (las culpas nunca son compartidas, o uno es culpable de todo o lo es el otro/a).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Luego viene el primer vástago, el bautizo si se tercia y las visitas a las casas de los abuelos. La pareja tiene su primera crisis y piensa en separarse, pero aguanta. Al ver que todo sigue igual surgen los primeros cuernos. El otro miembro de la pareja empieza a notar que su pareja no es tan cariñosa como antes y propone una separación temporal. La pareja se separa e inicia una "nueva vida", hipotecándose de nuevo. Se inicia el nuevo ciclo...
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pues este, suele ser más o menos el guión de la obra tan variada y fantástica del señor Cupido...Así que debido a mi edad y a la ley en vigor desde los anales de la Historia, no creo que lleeeegue a fooooooorma-li-zarrrrrr reeeelación al-gu-na, como consecuencia de la leeeen-ti-tuuud, entusiasmo y muestras de afecto recibidas. Y no será como puede pensarse por culpa mía, ni la de una inmensa mayoría de afectados, sino de los que nos enseeeñaron a ir tan deeees-pacio y sin daaarse cuuuuentaaa nos quiiiitaron las gaaaaanas de seguir con el intento.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ya ven la facilidad que tienen algunas personas para enamorarse. Al parecer necesitan que el otro miembro de la pareja les contagie el virus emocional para que reaccionen. Aún así no puedo dejar de agradecerles enormemente que me hayan dado tanto tiempo, el cual he aprovechado si hablamos en términos de libertad, paz y energías ahorradas. Tiempo que me ha permitido identificarme con la mayor parte de especies, que gracias a Dios no han llegado a ser tan racionales (por no decir frías) como la mía.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tampoco ha sido en vano si nos atenemos a los versos despechados que en su día dediqué al arquero más traidor y universal que existe en la humanidad. Versos que hoy sigo suscribiendo. Una prueba evidente de que la paciencia siempre trae sus frutos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ahora se da la paradoja que tienen que esperar otros. Yooooo yaaa no tengooo prisaaaaaaaas... y cada vez, visto lo visto, me faltan más ganas y me sobra pereza, para emprender este calvario de estaciones, por no hablar de carreras de obstáculos (al final el amante no es más que un pobre atleta emocional y sexual, que intenta batir sus récords diarios con su amado/a). Digo atleta porque la vida en el amor es igual o mucho más corta que en el deporte. ¡Es todo tan natural y sobretodo tan espontáneo!, que al final el reloj biológico y personal de uno de los dos termina por imponerse a los sentimientos del otro.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero lo más curioso de todo es cuando el varón no se decide a iniciar el contacto, como consecuencia de la lentitud impuesta y de la falta de señales o interés recibido. Entonces recaen sobre él multitud de adjetivos, como que si es frío, gay, rarito o algo paradito, cuando la verdad es que a los hombres se nos ha educado para que seamos lentos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sin embargo nadie nos entiende cuando nos dan una orden y tardamos un poco más de la cuenta en obedecer y hacer las cosas. Para separarse, por el contrario, se da la inexplicable paradoja de que no es para nada necesaria tanta lentitud. Con la primera falta o infidelidad basta para formalizar una ruptura express.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 19 de septiembre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-47714451200062621862023-09-11T04:28:00.014+02:002023-09-11T14:20:35.994+02:00Adaptarse o morir<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQvuh4VUdCM0jXtLwo9TtH_N2LeL227xFlL5A9D0lQvGgNPfoZ8aMiARTpy_0zuIQ4wZA9uXlZLIXqxlSOtyzvZo7aBsxCfP6rYX4hMGllnKgP5UqKKIiWDxQQQO0m8vfuXacT2TzfA20PwhdbsZCkxvoXeBZqoOF26jkHvRqTmFIocsLYYUzuZ2iyC6M/s1600/adaptarse%20o%20morir.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="675" data-original-width="1200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQvuh4VUdCM0jXtLwo9TtH_N2LeL227xFlL5A9D0lQvGgNPfoZ8aMiARTpy_0zuIQ4wZA9uXlZLIXqxlSOtyzvZo7aBsxCfP6rYX4hMGllnKgP5UqKKIiWDxQQQO0m8vfuXacT2TzfA20PwhdbsZCkxvoXeBZqoOF26jkHvRqTmFIocsLYYUzuZ2iyC6M/s1600/adaptarse%20o%20morir.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>Este el precio que vamos a pagar por no haber actuado antes de una forma más rápida y contundente</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No levantamos cabeza. Acabamos de salir del verano más caluroso y nos encontramos con las primeras DANAS (depresiones aisladas a niveles altos) que han causado estragos en distintos puntos de la península con todo lo que eso conlleva, como son pérdida de negocios, de enseres, de casas y de varias vidas, en el peor de los casos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Por si todo esto fuera poco, las inundaciones ocasionadas en Grecia y en Hong Kong han empantanado gran parte de dichos países y hace escasas horas nuestros vecinos marroquíes han sufrido el terremoto de mayor intensidad de toda su Historia. En tan solo treinta segundos han sido testigos de hasta qué punto puede cambiar tu vida, en el mejor de los casos, pues como todos sabemos al cierre de esta publicación, se contabilizan 2300 muertos y 2000 heridos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Como vemos el planeta está batiendo récords de registros a todos los niveles año tras año. Pero por lo que se ve, hay algunos a los que les hacen falta más datos y más víctimas, para darse cuenta de los efectos y la existencia del cambio climático. Este es el respeto que muestran con las víctimas, bien sean de la covid, de las catástrofes naturales o de los incendios intencionados y provocados en su mayor parte por el hombre. Y la solidaridad que muestran con la sociedad, incluyendo amigos y familiares, al hacer caso omiso a unas mínimas acciones cotidianas de sostenibilidad medioambiental. ¡Qué más da que la patria de todos se queme y los españoles se arruinen! Lo importante es morir con la bandera nacional en la muñeca y la palabra España en la boca.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
2023 no solo ha sido el año más caluroso, sino que le anteceden otros que han marcado año tras año una tendencia ascendente. El mediterráneo ha alcanzado su temperatura más alta de 28ºc. Con ello han aumentado como vemos las DANAS, pero también los incendios. Y hay que tener en cuenta que estamos solo en el inicio y nos queda por delante todo el otoño y el invierno.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Parece que hay que esperar a la era de las glaciaciones a la cual recurren algunos con frecuencia para justificar que siempre han habido ciclos meteorológicos adversos para la humanidad. La de Filomena no les ha servido de ejemplo, pero sin embargo creen el los hielos prehistóricos que nunca han visto. Así que si nos atenemos a ese argumento, como también han existido incendios, guerras y enfermedades en todas las épocas de la Historia, quedémonos inmóviles (bueno más bien helados como se han quedado ellos).
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Nada de médicos, de bomberos ni de policías que mantengan el orden. El caos forma parte de la naturaleza y también ha existido siempre, así que rindámonos sin más al devenir de la Historia. Las fuentes oficiales, contrastables y la voz de los agricultores y de los ganaderos está manipulada; su cabeza no...
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los científicos de una forma si se quiere diplomática, ya llevan tiempo avisando que estos fenómenos meteorológicos adversos van a ser más frecuentes y que vamos a tener que irnos acostumbrando a estos desajustes. Digo diplomáticos, porque esta dura adaptación a las nuevas condiciones es el precio que vamos a pagar por no haber actuado antes de una forma más rápida y contundente. Asunto que intentan omitir para no herir susceptibilidades y provocar efectos contrarios.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Y el que no nos afecte directamente, no quiere decir que no nos afecte a un nivel personal. Porque todos los telediarios se encargarán de difundir las imágenes en sus tres ediciones. Así podremos ver tierras de familiares quemadas, casas devastadas, cosechas perdidas y otra serie de calamidades similares a las que enumeraba al principio. No solo eso. Ya estamos pagando más como consecuencia de lo que he dado en llamar la inflación climática (que curiosamente no niegan y pagan). No hay más que ver el precio de la mayoría de productos como se ha encarecido por culpa de la falta de lluvias.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Hasta qué punto tienen los gobiernos que no toman medidas dicha responsabilidad? ¿Por qué han de pagar o soportar los países que toman medidas sostenibles la misma inflación que los países que se niegan a ponerlas en práctica? ¿Por qué, si por añadidura, nos condenan a sufrir un mayor número de enfermedades y a morir prematuramente? Como vemos la vida se ha vuelto más dura y más calamitosa para un gran número de personas en el planeta. Pero no hace falta ir a otros países. Nuestro país es una muestra de ello.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Consciente de lo raro que es encontrar buenas noticias en los medios, me permito la licencia de compartir alguna de ellas. Lo hago convencido de la importancia que tiene al permitir desintoxicarnos y poner en valor los valores humanos de héroes y heroínas, en esta época de muertes, denuncias, acosos, asesinatos, guerras, catástrofes naturales y no sé cuantas cosas más. Noticias que son capaces de que volvamos a mirarnos, aunque sea por unos días, como partes de una misma raza, de una misma familia.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El día que comenzó a llover y había previsiones de inundaciones, algunos empleados del Safari de Madrid, situado en las inmediaciones de Aldea del Fresno, optaron por quedarse a dormir con objeto de salvar la vida de los animales. Gracias a ello lograron conseguir con mucho sacrificio salvar a todos los animales.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Es emocionante leer el <a href="https://tinyurl.com/46ws8ur9">artículo</a> y ver como algunos animales reconociendo la situación, permitieron a algunos cuidadores que no conocían, ser evacuados. A algunos de ellos les emocionó la actitud de una avestruz que no dejó de incubar los huevos en todo momento, a pesar de la situación. Sinceramente y sintiéndolo mucho, dudo que algún empresario hubiera hecho lo mismo con sus empleados. Hechos que le vuelven a reconciliar a uno con su especie.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero hay sin duda otros ejemplos más directos dentro de nuestra propia especie. Me refiero al ejemplo humano y humanitario que nos dejan determinadas personas en los momentos más duros. Entonces podemos ver cómo el ser humano se olvida en esos momentos de nacionalidades y fronteras y acude al auxilio de las personas más necesitadas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hay, sin embargo, casos anónimos que trascienden estos ejemplos como el de Emma Igual, de 32 años, cooperante española y directora de la ONG Road to Relief fundada por ella misma, que será imposible borrarlo de nuestra memoria. Digo que trascienden, porque Emma, a diferencia de los voluntarios ocasionales, decidió dedicar su vida a ayudar a los demás.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La cooperante española (el voluntariado me parece una palabra que no está a la altura de estas personas), murió el sábado. El vehículo en el que viajaba junto con otros cooperantes fue alcanzado por un proyectil ruso que provocó su posterior incendio. Se convierte así en la primera víctima española de la mal llamada guerra de Ucrania. La guerra, no se olviden, la inició Putin.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Durante su estancia en la guerra, estuvo entregada a la cooperación, a la que se dedicó desde que tenía 20 años. El tiempo que estuvo en la primera línea de fuego, se encargó de evacuar civiles, y de ayudar a salir a la gente que vivía entre bombas. Logró salvar a 1300 personas, 650 de ellas niños y unas 300 con discapacidad. Hablaba siete idiomas, sin contar el más importante: el amor que dedicaba cada día a los demás.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Cuentan los noticiarios que solo dormía cuatro horas al día. Las únicas armas que portó Emma fueron la cantidad de provisiones que en forma de medicinas, comida, productos de higiene o leña, facilitaba a las personas que no podían moverse o decidían quedarse en la primera línea de fuego.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ignoro si existen más ángeles de la guarda sin alas, que con ellas. Y si los ángeles alados tienen la vocación e irradian el amor con el que Emma intentó combatir y vencer a esta injusta y maldita guerra. No me hace falta saber la respuesta, porque me imagino que en caso de existir, ya se ha transformado en uno de ellos. DEP.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 11 de septiembre de 2023. Fuente de la imagen:Road to reliev</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-67615486772377395902023-09-05T18:50:00.032+02:002023-09-11T05:01:28.467+02:00Perdón vs. disculpas<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhB-LYXOlsd3xPtXFvHDVpgHOv9ZOGMxuKewDaE80p-Td4wHb9942pI3WnfwA9_piBlzJjHBzzNNuhSUjXh1kP3XQvg8FRqRAdGHCC5f1ns6WJX5T1q_dLECXX6iBgc_msh4p8tXlC1QZHzQvsKdoFUb9PErLk1I0-a9viFRRAbCgcQDsJZRXhL3cqoK6k/s1600/perdon.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="450" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhB-LYXOlsd3xPtXFvHDVpgHOv9ZOGMxuKewDaE80p-Td4wHb9942pI3WnfwA9_piBlzJjHBzzNNuhSUjXh1kP3XQvg8FRqRAdGHCC5f1ns6WJX5T1q_dLECXX6iBgc_msh4p8tXlC1QZHzQvsKdoFUb9PErLk1I0-a9viFRRAbCgcQDsJZRXhL3cqoK6k/s1600/perdon.jpg"/></a></div>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<b>El perdón es un pretexto para volver a pecar</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No creo en esa jerga religiosa que nos inculcaron de pequeños. Por ejemplo, no necesito arrepentirme para reconocer mis errores. Y no necesito perdonar para disculpar. No necesito que nadie ponga límites ni tutores a mi espiritualidad. Ni padres adoptivos que no cumplen con el suyo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Mis disculpas siempre han sido y serán más sinceras que mis perdones. El perdón es un pretexto para volver a pecar. Para volver a hacer daño a la misma persona o a otra por el mismo o por otro motivo. El perdón es capaz de hacer daño al que lo practica y a su víctima. ¡Cuántas víctimas, al contrario que sus verdugos, que en su día perdonaron, están (y no sé si descansan) hoy en los cementerios!
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Toda falta que cometas tiene su perdón, así que no hay problema. Barra libre: tu alma quedará igual de limpia que antes de cometer tus faltas y como premio por haber actuado mal, podrás seguir pecando por los siglos de los siglos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Tal vez la sorpresa venga después, cuando en lugar de juzgar al que comete la falta, juzguen la responsabilidad social y personal del que las perdona sin la anuencia o consentimiento expreso del Juez Supremo. Porque al perdonar juzgas y condonas una conducta reprochable. En otras palabras, no solo haces caso omiso de ella, sino que la fomentas.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Es por tanto el que ofende el que tiene que perdonarse a sí mismo, después de haber reconocido su exceso. Otra cosa es ayudar al que ofende a reconocer y aceptar ese lado oscuro y humano que todos llevamos dentro. ¿De qué vale perdonar si el que ofende no es capaz de perdonarse a sí mismo?
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El perdón es un remedio que ha resultado ineficaz a la sociedad. No hay más que ver como los individuos que forman parte de la misma, siguen cometiendo las mismas faltas que se producían en los anales de la Historia.
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Hay cosas que no se pueden perdonar ni disculpar, como es el ensañamiento en vida contra alguien o el asesinato de un ser querido. El perdón y las disculpas tienen sus límites. Y si no, ¡díganme!, ¿existe alguna penitencia para personajes genocidas, que a todos nos vienen a la memoria, que pueda librarles de todo el mal y el daño que han causado a la humanidad?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La persona que no perdona no es peor persona que su ofensor. No perdonar no significa odiar, igual que perdonar tampoco significa olvidar. El perdón necesita su tiempo. No es algo instantáneo. Una disculpa sincera necesita su tiempo, su fase de duelo, de reflexión y de cura o reparo personal. Hay agravios cuyos perdones llevan toda una vida.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Cuando uno disculpa queda en paz consigo mismo. Cuando uno perdona queda en paz (bien) con Dios, con el prójimo y consigo mismo. El acto de disculparse es un acto natural y sincero que sale del corazón de la persona. El perdón suele estar inducido socialmente y conlleva por tanto menos arrepentimiento y sinceridad. Por eso el perdón suele pedirse y las disculpas no.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
¿Tenemos que disculparnos más y perdonarnos menos...?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 5 de septiembre del 2023. Fuente de la imagen: wikimedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-16766944513502974522023-08-16T15:09:00.021+02:002024-02-11T20:16:24.072+01:00Víctimas<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSnUvKwdooBZrDbghg8SI9tvdlCWUUs7cGQ3NDCxYStSbKo3LGtK6sxCtZJlgs11bxzy3MijWSQZQF-THYNNmKZSMBCF54VdIY6wVkMBCiySjdq6Dfmqu7M4OeFNKSw18VXRXqhQbK9UsUGBHpnP7ZigRoqlyT-ZzCjPBkcHTo7oCu1r_t6W-p9Jc8opA/s1600/SANCHO.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSnUvKwdooBZrDbghg8SI9tvdlCWUUs7cGQ3NDCxYStSbKo3LGtK6sxCtZJlgs11bxzy3MijWSQZQF-THYNNmKZSMBCF54VdIY6wVkMBCiySjdq6Dfmqu7M4OeFNKSw18VXRXqhQbK9UsUGBHpnP7ZigRoqlyT-ZzCjPBkcHTo7oCu1r_t6W-p9Jc8opA/s1600/SANCHO.jpg"/></a></div>
<b>Es posible que Daniel sea víctima de la justicia pero Edwin ha sido la víctima real de una muerte injusta</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El asesinato del cirujano Edwin Arrieta en Tailandia ha abierto un debate sobre la naturaleza humana. Los telespectadores acudimos estos días atónitos a distintos espacios informativos y de opinión que intentan arrojar luz sobre dicho desenlace.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los periodistas, abogados y criminólogos hacen lo posible para explicar lo ocurrido más que para entender el comportamiento del agresor. De ahí que no haya tenido más remedio que recurrir a la opinión de un reputado psiquiatra, como es Luis Rojas Marcos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Mediante la lectura de su obra “Las semillas de la violencia” he intentado acercarme a la mentalidad del agresor y conocer un poco más la naturaleza humana. Para ello he procedido a adentrarme en los capítulos que guardan una relación más directa con el caso que nos ocupa.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
He de reconocer la profundidad con la que Rojas Marcos aborda el tema. La mayor parte lo hace gracias a su gran conocimiento y experiencia. Y otras se vale de extractos y citas de otros autores, aportaciones gracias a las cuales enriquece más su obra.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Les recomiendo, por tanto, que antes de sumergirnos en las profundidades luminosas y tenebrosas de la mente humana, se pertrechen su traje de neopreno para no quedarse helados, ya que el concepto que tienen del ser humano es muy posible que no se corresponda con el que ustedes tienen de los demás y de ustedes mismos.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Por ejemplo Freud ya nos advertía que el hombre es un ser que está dominado por un impulso de aniquilarse a sí mismo y de exterminar a otros. Es más, en su obra “El malestar de la cultura”, añade: “El hombre no es una criatura bondadosa necesitada de amor. Como mucho usaría defenderse si es atacado. Por el contrario es una criatura entre cuya dotación de instintos cuenta con una poderosa ración de agresividad. Homo homini lupus (el lobo es un lobo para el hombre). ¿Quién se atreve a refutar este axioma, después de todas las experiencias de la vida y de la Historia?”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Afirma Rojas, que “el goce con el sufrimiento ajeno es un rasgo exclusivo de nuestra especie”. Y lo vuelve a recalcar con otra serie de reflexiones: "La crueldad de los animales es un mito, la del ser humano es una siniestra realidad”. “La persona es la criatura más cruel que hay sobre la tierra”. Y yo me pregunto: ¿es posible que como consecuencia de esta imagen idílica que tenemos del ser humano nos cause escalofríos, casos como el del asesinato del cirujano?
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Subamos un poco más a la superficie y tomemos algo de oxígeno. Es cierto que el ser humano es un ser imprevisible, ya que como afirma Rojas, también nace con la capacidad de la compasión, de la generosidad, de la abnegación y de la empatía: “si fuéramos por naturaleza crueles y egoístas la humanidad no hubiera podido sobrevivir porque ninguna sociedad puede existir sin solidaridad, sin que sus miembros estén continuamente ayudándose unos a otros”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
“El crimen siempre ha estado y estará entre nosotros”, afirma Don Luis. Es cierto, añadiría. Cada día desde los anales de la Historia pagamos la muerte de distintas especies para sobrevivir. ¿No somos los autores intelectuales de dichos actos?, cabría preguntarse.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Según Rojas "las raíces de la crueldad o del crimen violento se plantan en los primeros años de la vida en el seno del hogar, se cultivan en un medio social impregnado de desigualdades y frustraciones, y crecen avivadas por valores culturales que glorifican las soluciones agresivas de los conflictos entre las personas". En otras palabras: “la crueldad tanto física como emocional mutilan psicológicamente al niño y le pueden transformar en un ser sádico y destructor”. De esta forma, “Los hombres y las mujeres, en contraste con los demás mamíferos son los únicos primates que pueden sentir placer haciendo daño o aniquilando a sus compañeros de vida, sin motivo, ni razón”, añade en otra de sus aportaciones.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Gibran Jalil Gibran escribe en su libro “El profeta”: “A menudo escucho que me referís al hombre que comete un delito como si él no fuera uno de vosotros, como un extraño y un intruso en nuestro mundo. Más yo os digo que de igual forma que el más santo y el más justo, no pueden elevarse por encima de lo más sublime que existe en cada uno de vosotros, tampoco el débil y el malvado pueden caer más bajo de lo más bajo que existe en cada uno de vosotros”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
He tenido la oportunidad de escuchar a más de un psicólogo y psiquiatra que cualquier ser humano es capaz de matar cuando está sometido a ciertas circunstancias de estrés, lo cual me lleva a afirmar que todos llevamos un potencial asesino dentro. Otra cosa es que todavía no hayamos tenido la suerte de conocerle o que no tengamos el valor de reconocerle. Es posible que Daniel sea víctima de la justicia pero Edwin ha sido la víctima real de una muerte injusta.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El doctor se muestra crítico y condescendiente con “el atractivo de la violencia” en los medios: “El sustituto moderno del circo, de la guillotina o del patíbulo son las escenas que disemina cada minuto del día la industria del cine y de la televisión, destinados a representar con más o menos realismo toda la variedad existente de violencia entre las personas”. “Quienes lo deseen pueden reunirse en cualquier momento en a comodidad del hogar familiar y recibir la dosis diaria de sadismo y de agresión audiovisuales a través del televisor, presenciar lo más violento que la vida puede ofrecer”. Habría que añadir a la lista los smartphones, móviles y tabletas de la actualidad.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Cuenta Rojas Marcos como a finales del mes de noviembre de 1963, un día después del asesinato del presidente de EE.UU John F. Kennedy, el diario New York Times publicó el siguiente comentario editorial: “El asesinato a tiros del presidente Kennedy fue el método normal de tratar con un adversario, como nos enseñan incontables programas de televisión. Esta tragedia es una de las consecuencias de la corrupción de la mente y los corazones de la gente, a causa de la violencia televisiva. Esto no puede continuar”. Resulta por tanto contradictorio ver como los mismos medios que tratan la noticia de una forma magnánima sean los mismos que difunden escenas violentas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Según un estudio llevado a cabo por la Asociación Americana de Psicología en 1993, los niños estadounidenses vieron antes de cumplir los 14 años, 8.000 asesinatos y 100.000 actos violentos. En España en ese mismo año según un estudio de la Asociación de Telespectadores y Radioyentes los menores vieron a la semana 670 homicidios, 420 tiroteos, 8 suicidios y 30 torturas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Asimismo, según fuentes recogidas por el autor, el 25% de los criminales entrevistados en una prisión norteamericana indicaron que en la ejecución de sus crímenes habían utilizado métodos que habían copiado a propósito de programas de televisión. Otros estudios establecen una relación entre la introducción de la televisión en el país y el aumento de la incidencia de homicidios. Por ejemplo, en EE.UU y Canadá, las tasas anuales de asesinatos se duplicaron a los 15 años de introducirse la televisión, lo que ocurrió en 1945. Lo mismo sucedió en Sudáfrica donde el gobierno no permitió la televisión hasta 1975.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Aún con estos datos, el psiquiatra y autor del libro piensa que “la televisión no provoca necesariamente comportamientos violentos si no que los hace menos alarmantes, más aceptables” (sic), ya que al observar escenas despiadadas nos liberamos indirectamente de nuestras ocultas tendencias destructivas, afirmaciones que contrastan, o al menos cuestionan, los estudios anteriormente mencionados.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Lo que es cierto, según reconoce Rojas Marcos, es que la televisión (y los medios audiovisuales actuales), “se enfrentan con un problema difícil si no imposible de resolver cómo reflejar la agresividad que realmente existe en nuestra sociedad sin explotarla ni fomentarla”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
En cualquier caso, arrebatar la vida a alguien no debería ser penado con el mismo acto que se condena. La pena capital es injusta porque con ella no solo se castiga al culpable. También se condenan a sus familiares y amigos inocentes así como al resto de la sociedad a padecer un dolor emocional y moral de por vida. Constituye una injusticia que emanando de la justicia, termina por anularse a si misma.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 16 de agosto del 2023. Fuente de la imagen: wikipedia.commons.org</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-892731597302923402023-08-04T12:07:00.017+02:002023-08-04T20:13:24.885+02:00Ganadores y perdedores<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghgBo5F-IylIqkIcRkXMc2sgXX5fPFzqp2YxBUvAab6kxdlgf1GW2TrK7WOFVP-h7J0HdyAMHspoaE3rxA16waflL_9pTS0M7SSj9DZKa-KIZmBMZZcJZasXnrdBMFjFk-xM39IpIvoCdo_FQg0Dk9G3C_QOJG3u1nvrRjDaFQFnKJyyJ7IUPmj_8o70g/s2000/ganadores%20y%20perdedores.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" width="600" data-original-height="1333" data-original-width="2000" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghgBo5F-IylIqkIcRkXMc2sgXX5fPFzqp2YxBUvAab6kxdlgf1GW2TrK7WOFVP-h7J0HdyAMHspoaE3rxA16waflL_9pTS0M7SSj9DZKa-KIZmBMZZcJZasXnrdBMFjFk-xM39IpIvoCdo_FQg0Dk9G3C_QOJG3u1nvrRjDaFQFnKJyyJ7IUPmj_8o70g/s600/ganadores%20y%20perdedores.jpg"/></a></div>
<b>Los resultados de las elecciones del 23J han sido atípicos ya que han dado como resultado a dos ganadores y a dos perdedores</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Un <a href="https://www.niusdiario.es/nacional/politica/20230731/mitad-espanoles-cree-gobierno-pp-psoe-pero-imposible_18_010142326.html">estudio</a> realizado entre el 12 y el 21 de julio por la Fundación BBVA ha puesto de manifiesto que el 58% de los encuestados vería con buenos ojos un pacto PP-PSOE, aunque el 84% lo ve improbable.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los resultados de las elecciones del 23J han sido atípicos ya que han dado como resultado a dos ganadores y a dos perdedores. El PP ha ganado las elecciones pero el PSOE la gobernabilidad. Feijóo ha perdido sus expectativas de salir investido y Sánchez, de salir de la Cámara Baja como Presidente, contará con un gobierno más frágil que le permita acometer reformas de calado.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si cogiésemos los eslóganes con los que ambas fuerzas concurrieron a las elecciones: “Es el momento” (PP), y “Adelante” (PSOE), podremos concluir que ninguno de los dos ha cumplido sus expectativas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los españoles le han enviado a Feijóo millones de cartas en forma de votos para comunicarle varios asuntos. El primero de ellos para marcarle el camino de la centralidad que abandonó antes de voxalizarse y el segundo para decirle como consecuencia de lo anterior que no era su momento. Algo que podría resumirse en dos palabras: asi no.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero si nos atenemos al estudio anterior los españoles también le enviaron un mensaje a Sánchez (las elecciones fueron el día 23 y el estudio se realizó unos días antes), y es que avanzar no es lo mismo que huir hacia adelante al precio que sea. En otras palabras: el fin no justifica los medios.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El escenario que han dejado dichos resultados y que algunos han calificado muy acertadamente de diabólico, adelanta un escenario de repetición electoral si no en el corto en el medio plazo. Tiempos que intentarán aprovechar las dos fuerzas para distanciarse y concurrir con una mayor ventaja. Quedan por ver los nuevos equipos y las nuevas estrategias que diseñarán ambas fuerzas con el fin de alcanzar dicho objetivo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El PP se ve en la incapacidad de ofrecer a los españoles una gran coalición que garantice una legislatura a cuatro años. En primer lugar porque mantiene pactos con Vox. En segundo lugar porque los tonos que emplea a la hora de dirigirse al PSOE no son precisamente de conciliación. En tercer lugar porque no han ofrecido una propuesta programática coincidente y común con la de los socialistas. Es más, de llegar, lo haría tarde y mal. Tarde, después de haber pactado con Vox y de haber noqueado durante cuatro años las políticas del PSOE, por no citar el desgaste de la figura de su líder.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Sería por tanto injusto echar todas las culpas del vuelco electoral de la última semana a Feijóo. Conviene recordar en ese sentido, los fallos en los que ha incurrido su equipo de asesores entre los que muy posiblemente se encuentre Miguel Ángel Rodríguez.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Feijóo declinó la oferta y la oportunidad que le ofrecieron varios medios para explicar a su electorado su programa electoral y contrastarlo con las demás fuerzas, pero en última instancia los desestimó. Tampoco rectificó ni pidió disculpas por sus errores. Pactó con Vox antes de las elecciones generales. Se confió de las encuestas. Se relajó al ganar el debate televisivo. Absorbió a Ciudadanos pero no supo conservar al electorado de centro. Y falto de propuestas atractivas, olvidó por añadidura la didáctica de las medidas de su programa electoral.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
En un escenario tan volátil como incierto y ajustado y desde el punto de vista orgánico da la impresión que una repetición electoral no le interesa a ninguna de las dos fuerzas (más vale un empate que una hipotética derrota). Y desde un punto de vista público, convocar a los ciudadanos a votar de nuevo, después del esfuerzo que han hecho, dejando de lado sus vacaciones, sin cambiar las caras de los políticos que no han sido capaces de gestionar dichos resultados y voluntades, sería visto posiblemente como un fracaso por los españoles.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No haría falta por tanto aventurar los efectos que una nueva convocatoria tendría en un clima de mayor polarización e inestabilidad social como son un aumento del voto cabreado y de la abstención que favorecería a las fuerzas extremas de uno y otro lado.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La cosa cambia si se analiza exclusivamente desde el punto el punto de vista económico ya que la repetición de unas elecciones les costaría a los españoles 200 millones de euros. Sin embargo si se compara esta cantidad con los 71.000 millones de quita que pide ERC del FLA, Fondo de Liquidez Autonómico, al cual habría que añadir otros tantos cientos de miles de millones que otras autonomías solicitarían ante dicho agravio comparativo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Ante esta situación la solución más pausible que se contempla hasta la previsible convocatoria de elecciones en el corto plazo, es que JUNTS respalde a los socialistas con un SI. Con ello al menos el PSOE podría frenar las derogaciones y medidas antisociales que la coalición PP-VOX pensaba llevar a cabo y que tanto han costado sacar adelante estos cuatro años.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Feijóo necesita abrir su partido al centro y a las demás fuerzas si desea llegar a la Moncloa. Ahora tiene la oportunidad de hacerlo, disolviendo primero los pactos que ha alcanzado con Vox y ofreciendo a Sánchez un programa de centro social, encabezado por figuras independientes y de reconocido prestigio, que garanticen la gobernabilidad y estabilidad de España durante cuatro años.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 4 de agosto del 2023. Fuente de la imagen: wikipedia</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4902195712514375431.post-12959364598574967812023-07-19T18:51:00.029+02:002023-07-25T09:55:39.162+02:00Abascalización<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyVKmImaGlvxNrHSP44MW2b05gldt-rgBiU0kxlt2yjDYjtZmmHAxG5trFegMUBSzt56HiRTfpNwJeyPrNL3PfMmtZvr9u-J6mxt0_z9VAkd2owwJAV1hSwuZoG91yNZRCmjGJGKVkYx6QYHBCYka_yRUUZTUb_hvgp3Q7JjZmZ7xdKzDwVpO4gzAuizM/s1600/foto%20columna.jpeg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; "><img alt="" border="0" data-original-height="450" data-original-width="800" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyVKmImaGlvxNrHSP44MW2b05gldt-rgBiU0kxlt2yjDYjtZmmHAxG5trFegMUBSzt56HiRTfpNwJeyPrNL3PfMmtZvr9u-J6mxt0_z9VAkd2owwJAV1hSwuZoG91yNZRCmjGJGKVkYx6QYHBCYka_yRUUZTUb_hvgp3Q7JjZmZ7xdKzDwVpO4gzAuizM/s1600/foto%20columna.jpeg"/></a></div>
<b>El señor Feijóo se ha abascalizado, ¿quién lo desabascalizará? El voto que lo desabascalize, buen desabascalizador será</b>
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
"No mentí ni miento. Si alguna vez digo algo que no es correcto (verdad), no es fruto de la mentira, sino de la inexactitud", ha sentenciado el candidato popular. Para exponer dicha aclaración el señor Feijóo no ha dudado para ello en emplear el término “inexactitud”, un concepto mucho más utilizado en el campo numérico, científico, matemático o estadístico. Y al hacerlo ha vuelto a ser inexacto en su exposición. Porque inexactos son los números, no las palabras.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La mentira por el contrario es más propia encontrarla en el lenguaje verbal. Es decir, se suele mentir más con las palabras que con los números. Por una sencilla razón: porque hablamos más que operamos. Excepto el señor Feijóo, que según parece, habla en lenguaje binario, motivo por el cual es mucho más “inexacto” en sus manifestaciones.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Nos encontramos por tanto ante un caso especial en el que el sujeto en cuestión es inexacto con las palabras y a la inversa de todos, es posible que no mienta con las palabras y sí con los números. ¿Son verídicos por tanto el número de su calzado, la talla de sus prendas, la altura y peso de su cuerpo, los tickets de sus compras y la hora que marca su reloj...?, cabría preguntarse.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
No sería descabellado pensar que el programa electoral del PP lleve como mínimo el mismo número de inexactitudes que lleva el señor Feijóo en su campaña electoral. Solo nos faltaría saber cuántas inexactitudes considera que equivalen a una mentira, para determinar el grado de confianza que se le debe profesar.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Faltaría también que nos explicase el señor Feijóo si las medidas que piensa aplicar y que no figuran en su programa electoral son para él una inexactitud o una mentira. Pero todos nos imaginamos la respuesta: Eso no es una mentira, es un olvido.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
"Yo os puedo asegurar que después de las cuatro campañas que hice en Galicia, nunca le dediqué un minuto a decirle a los gallegos que no soy un mentiroso. Porque los gallegos saben que yo no miento. No miento en el gobierno, ni en un mitin, ni en ningún sitio".
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Si el señor Fakejóo miente cuando dice que no miente, es muy posible que cuando no diga la verdad esté en lo cierto. Por ejemplo Don Alberto dice que prefiere gobernar en solitario, pero ha pactado con Vox en ciudades donde no era necesario pactar con dicha formación. Es el caso de Ciudad Real. Por no citar las falsedades o “inexactitudes” que expuso en el debate emitido en Atres Media y detectadas por el diario <a href="https://elpais.com/espana/elecciones-generales/2023-07-10/mentiras-y-medias-verdades-del-debate-de-atresmedia-entre-sanchez-y-feijoo.html">El País</a>. Un debate, por cierto, en el que el candidato, según manifestó a los medios, se divirtió mucho, no se sabe si vertiendo dichas inexactitudes.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Los gallegos que no conocían las inexactitudes de su expresidente es más que posible que se hayan arrepentido de su voto y los españoles que se hayan percatado de sus contradicciones, medio verdades o inexactitudes es posible que al votar en su lugar a otro candidato no le hayan mentido. Tan solo habrán sido inexactos a la hora de emitir su voto.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Pero a pesar de sus continuos problemas con la verdad, que no con la mentira, a la hora de interpretar la realidad, el señor Feijóo desea para los españoles un Presidente que no mienta (perdón, que sea exacto con la verdad). Cabe pensar, por tanto, que si el señor Feijóo afirma que nunca miente (ni siquiera a si mismo), sus inexactitudes le transporten automáticamente a una realidad paralela: a la de su propia verdad y su propio mundo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La campaña de Feijóo ha sentado un precedente en las elecciones democráticas, porque da la casualidad que todas las inexactitudes en las que incurre el candidato popular benefician a su partido. Así que para ser más exactos, término que le gusta más a don Alberto, podríamos hablar más de posibles "inexactitudes interesadas". No es por tanto muy difícil distinguir al Feijóo exacto del Fakejóo "inexacto".
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
Las inexactitudes suelen ser puntuales, pero la lista de imprecisiones, medio verdades y contradicciones por parte de Fakejóo, antes de llegar al poder, a diferencia con su oponente más directo, empiezan a adquirir matices graves y muy preocupantes. Así que en medio de tanta inexactitud cabe otra posibilidad: que el señor Fakejóo no haya mentido pero que tampoco cuente la verdad.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El lunes 16 de julio, en una entrevista en el programa matutino “La Hora de la 1” que presentan Marc Sala y Silvia Intxaurrondo, el candidato popular le pidió a esta última una rectificación. El señor Feijóo mantenía que el PP siempre habían subido las pensiones por encima del IPC. Intxaurrondo, en lugar de decirle que eso era una mentira, le dijo: “No es correcto, señor Feijóo”. Para afianzar su negativa, Intxaurrondo sacó los datos a relucir, afirmando que “no lo hicieron ni en 2012, ni en 2013, ni en 2017”.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
“Mis datos son correctos, y no lo hicieron en esos años”, se defendió Intxaurrondo, manteniendo su postura. El líder del PP sugirió a su entrevistadora que, “como hay hemeroteca, va a comprobar lo que le digo y, si estoy equivocado, le pido disculpas”, afirmó. “Si lo está usted, espero que lo digan. El único partido que no revalorizó las pensiones fue el PSOE”, sentenció tajante Feijóo.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El señor Feijóo no ha pedido disculpas al programa, a la periodista, a los telespectadores, a sus votantes y al resto de españoles por la cantidad de datos “inexactos” que lleva aportados. Los gallegos, los extremeños y los españoles ahora saben que el señor Feijóo y la señora Guardiola (“Yo no he mentido nunca, mis principios son los mismos”), no han mentido, tan solo han sido inexactos, ya que ninguno de los dos han pedido disculpas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
La realidad del señor Feijóo es mucho más precisa y exacta que la de los datos oficiales y que la del resto de los españoles. Así que visto lo visto, es más fácil que los perjudicados de dichas palabras comprueben por sí mismos cada una de ellas y cada dato, antes de que el causante de dichos perjuicios opte por enmendar los mismos o al menos pedir disculpas. Porque como decía Sabino Fernández Campo, antiguo Jefe de La Casa Real: "Ni está, ni se le espera" a la hora de ejercer dicho cometido.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El programa del señor Feijóo consiste en derogar el Sanchismo con el Abascalismo. Vamos, lo que en términos coloquiales se conoce como "dar el cambiazo". Porque al parecer el programa del PP contiene más derogaciones que propuestas.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
El ajuar de Feijóo a Abascal ha sido el vestido de pactos que ambos han tejido a lo largo y ancho de la España única, triste y crispada que veremos si la boda de los novios tiene lugar. En otras palabras: Feijóo ya ha sido abascalizado. ¿Quién lo desabascalizará? El voto que lo desabascalize, buen desabascalizador será.
<!-- wp:paragraph {"align":"justify"} -->
<p class="has-text-align-justify">
<!-- /wp:paragraph -->
<!-- wp:paragraph -->
<p><strong>José Luis Meléndez</strong>. Madrid, 19 de julio del 2023. Fuente de la imagen: Jesús Olmedo. Elplural.com</p>
<!-- /wp:paragraph -->
</div>
</div>José Luis Meléndezhttp://www.blogger.com/profile/04437643691978116027noreply@blogger.com0